Frases de Jean-Jacques Rousseau

Fue un polímata suizo francófono. Fue un escritor, pedagogo, filósofo.

Una de las ventajas de las buenas acciones es la de elevar el alma y disponerla a hacer otras mejores.
El hombre que no conoce el dolor no conoce ni la ternura de la humanidad ni la dulzura de la conmiseración.
Si hubiera una nación de dioses, éstos se gobernarían democráticamente; pero un gobierno tan perfecto no es adecuado para los hombres.
No conozco mayor enemigo del hombre que el que es amigo de todo el mundo.
Donde quiera que veáis la moderación sin tristeza, la concordia sin esclavitud, la abundancia sin profusión, decid confiadamente; es un ser venturoso el que aquí manda.
La templanza y el trabajo son los dos verdaderos médicos del hombre; el trabajo aguza su apetito, y la templanza le prohíbe abusar de él.
No basta que una esposa sea fiel, es menester que su marido, sus amigos y sus vecinos crean en su fidelidad.
El vicio rara vez se insinuó oponiéndose a la honradez; casi siempre toma el disfraz de ésta.