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Frases sobre la Vanidad

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  • La vanidad es una fuerte tentación de mentir; hace que la gente magnifique su mérito.




  • La gente pequeña, cuando se hincha de vanidad y coge debajo a los que fueron grandes, es terrible, es peor que las fieras.




  • La adulación es un comercio de mentiras, basado, de una parte, en el interés,y de la otra, en la vanidad.




  • Alabamos a un hombre cuando lo creemos vanidoso; le suplicamos cuando lo creemos débil.




  • El que se alaba a si mismo, pronto encuentra quien se ria de él.




  • Suprime la vanidad en las mujeres y habrás suprimido la mitad, por lo menos,de la ambición de los hombres.




  • La vanidad objeto en todos los siglos de la profesión de la sabiduría.




  • ¿Queréis zafaros de ciertos importunos que os llaman amigo? Pedidles un servicio que no halague su vanidad.




  • ¿Qué es cortesía? Un convenio entre dos personas, en el que cada una disimula su vanidad en beneficio de la otra.




  • De donde no sin razón digo que la mujer, cuanto más mirare la cara, tanto más destruye la casa. Si esto es aun en mujeres vituperio, ¿cuánto lo será más en los hombres?




  • La vanidad de la gloria humana no trae nada de comer, sino viento y vaciedad.




  • Cuando un hombre sufre un accidente en la vía pública, echa una mirada a su cartera; la mujer se echa una mirada en el espejo.




  • La perspicacia tiene un algo de poder adivinatorio que halaga nuestra vanidad más que cualesquiera otras cualidades espirituales.




  • Lo que se llama liberalidad no es frecuentemente otra cosa que la vanidad de dar.




  • No hay mujer tan alta que no huelgue ser mirada, aunque el hombre sea muy bajo.




  • Ya conocéis cómo son las mujeres : Un año para arreglarse y para peinarse.




  • La necedad y la vanidad son compañeras inseparable.




  • No se tiene idea de las tonterías que una mujer es capaz de decir, cuando quiere, a todo precio, hacerse notar.




  • A todos los asnos les gusta oirse rebuznar.




  • Los que no se retractan nunca, se aman más a si mismos que a la verdad.




  • Dichoso aquel que tiene tanta vanidad que jamás habla bien de sí, teme a quienes le escuchan y, recelándose de la soberbia ajena, no compromete sus propios méritos.




  • Aun la vida sacrificamos con gusto, con tal que se hable de ello.




  • El que quiere adoptar el continente de, un hombre orgulloso, debe ocultar su vanidad.




  • Del que está muy enamorado de sus palabras, no se pueden esperar obras famosas.




  • La religión ofrece pocas dificultades a los humildes, muchas a los soberbios, e insuperables a los henchidos de vanidad.




  • ¿Qué es lo que ha dado nacimiento a la revolución? La vanidad. ¿Qué es lo que la terminará? La vanidad también. La libertad es nada más que un pretexto.




  • Quitad a nuestros sabios el placer de ser escuchados, y el saber, carecerá de valor para ellos.




  • La carne tienta con dulzuras, el mundo con vanidades, el demonio con amarguras.




  • Apenas puede concebirse de cuán variadas maneras la vanidad desbarata sus propios planes.




  • Todos los héroes acaban por hacerse muy fastidiosos.




  • Un hombre vanidoso no puede ser del todo un hombre rudo, puesto que desea agradar y se atempera a los demás.




  • Decir a uno que es presuntuoso, es llamarle loco por muy buen estilo.