Frases de Albert Schweitzer

Fue un médico, filósofo, teólogo y músico franco-alemán, con ciudadanía inicialmente alemana y después francesa.

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El ejemplo no es lo principal para influenciar a otros. Es la única cosa
El ejemplo es liderazgo.
El primer paso en la evolución de la ética es un sentido de solidaridad con otros seres humanos
La intención de la humanidad es servir, manifestar compasión y la voluntad de ayudar a los demás la mayor cantidad de veces posibles.
La felicidad es una buena salud y una mala memoria.
Hay dos formas de refugiarse de las miserias de la vida: la música y los gatos
No me importa saber si un animal puede razonar. Solo sé que es capaz de sufrir y por ello lo considero mi prójimo
Teniendo respeto y reverencia por la vida, entramos en una relación espiritual con el mundo
Una religión o filosofía que no se base en el respeto por la vida no es una religión o una filosofía verdadera.
La felicidad no es más que buena salud y mala memoria
La ética es la actividad del hombre dirigida a asegurar la perfección interna de su propia personalidad.
La ética no es sino la veneración de la vida.
Hasta que el hombre extienda su círculo de compasión a todas las cosas vivientes, el hombre no podrá encontrar por sí mismo la paz.
Un hombre es ético solo cuando la vida como tal es sagrada para él.
El éxito no es la clave de la felicidad. La felicidad es la clave del éxito. Si te gusta lo que estás haciendo, serás una persona exitosa.
El éxito no es la llave de la felicidad. La felicidad es la llave del éxito. Si amas lo que haces, tendrás éxito.
La bondad puede hacer mucho. Como el sol que derrite el hielo, la bondad evapora los malos entendidos, la desconfianza y la hostilidad.
Mientras el círculo de su compasión no abarque a todos los seres vivos, el hombre no hallará la paz por sí mismo.
Los años arrugan la piel, pero renunciar al entusiasmo arruga el alma.
El que obtiene fuerza mediante la superación de los obstáculos, posee la única fuerza que puede superar la adversidad.
El espíritu de la edad está lleno de desprecio por el pensamiento.
El propósito de la vida humana es servir, mostrar compasión y tener voluntad de ayudar a otros.
Estamos todos muy juntos, pero todos estamos muriendo de soledad.
El ejemplo no es lo que más influencia a personas. Es lo único.
La felicidad no es más que buena salud y mala memoria.
A veces nuestra luz se apaga y se vuelve a encender por un chispa de otra persona.
El éxito no es el camino a la felicidad, la felicidad es el camino hacia el éxito; si amas lo que haces, tendrás éxito.
Con veinte años todos tienen el rostro que Dios les ha dado; con cuarenta el rostro que les ha dado la vida y con sesenta el que se merecen.
¿Es algo maravilloso, la gente puede imitarlo.
Yo puedo hacer otra cosa que ser reverente ante todo lo que se llama vida. No puedo hacer otra cosa que sentir compasión por todo lo que se llama vida. Ese es el comienzo y el fundamento de toda ética.
Compasión, en la que todas las éticas deben echar raíces, sólo puede alcanzar su amplitud y profundidad, si abarca a todos los seres vivos y no se limita a la humanidad.
Hasta que se extiende a su círculo de compasión para incluir a todos los seres vivos, el hombre no encontrará paz.
El verdadero valor de un hombre no se encuentra en el hombre mismo, sino en los colores y texturas que cobran vida en otros.
Vivimos en una época peligrosa. El ser humano ha aprendido a dominar la naturaleza mucho antes de haber aprendido a dominarse a sí mismo.
El dolor es para la humanidad un tirano más terrible que la misma muerte.
Un hombre es ético sólo cuando la vida, como tal, es sagrada para él, la de las plantas y animales como la de sus semejantes, y cuando se dedica amablemente a toda la vida que está en necesidad de ayuda.
El propósito de la vida humana es servir, mostrar compasión y la disposición para ayudar a otros.
Incluso si es una pequeña cosa, haz algo por quienes tienen necesidad de ayuda.
Los únicos que serán realmente felices son los que han encontrado cómo servir.
Un optimista es una persona que ve la luz verde en todas partes, mientras que un pesimista sólo ve el semáforo en rojo… la persona verdaderamente sabia es daltónica.