Frases de Actitud Positiva

Sin lluvia no habría arcoiris.

Soy un optimista. No merece la pena ser cualquier otra cosa.

Las frases de actitud positiva te ayudan a creer en ti mismo, en tus habilidades, en tus capacidades y en tus sueños. Te ayudan a decirte que todo está bien, que todo va a salir bien, incluso cuando todo parece perdido. Te recuerdan que eres único e irrepetible, con tu propio talento y potencial. Te impulsan a seguir adelante sin rendirte ni un minuto antes de lograr lo que has soñado. Estas palabras pueden ser la chispa que necesitas para alcanzar tus metas.

Tu actitud se puede convertir en un castillo que te proteja de las flechas de la negatividad.

No creo en tomar la decisión correcta. Yo tomo una decisión y la convierto en correcta.

Si sigues diciendo que las cosas van a ser malas, tienes una buena oportunidad de convertirte en profeta.

El fracaso es una buena oportunidad para empezar de nuevo con más inteligencia.

Si intentamos ver algo positivo en todo lo que hacemos, la vida no será necesariamente sencilla pero será de más valor.

Una actitud positiva provoca una reacción en cadena de pensamientos, eventos y resultados. Es un catalizador y desata extraordinarios resultados.

No hay nada tan fácil, pero se hace difícil cuando lo haces a regañadientes.

Enamórate de tu existencia.

Solo porque seas desgraciado no significa que no puedas disfrutar de tu vida.

La felicidad no es algo ya hecho. Viene de tus propias acciones.

Poseer menos llaves permite abrir más puertas.

Nunca he conocido a un hombre tan ignorante que no haya podido aprender algo de él.

Las actitudes son contagiosas. ¿Merece la pena contagiarse de la tuya?

Todos vivimos bajo el mismo cielo, pero no todos tenemos el mismo horizonte.

Una actitud positiva provoca una reacción en cadena de pensamientos positivos, eventos y resultados. Es un catalizador y desata resultados extraordinarios.

La construcción de una actitud positiva empieza por tener confianza en uno mismo. La confianza refuerza la capacidad, duplica la energía, fortalece las facultades mentales y aumenta el poder.

El pensamiento positivo es un pensamiento poderoso. Si quieres la felicidad, la plenitud, el éxito y la paz interior, empieza a pensar que tienes el poder de conseguir esas cosas. Céntrate en el lado bueno de la vida y espera resultados positivos.

Una actitud positiva se llega más fácilmente a través de un análisis deliberado y racional de lo que se requiere para manifestar patrones de pensamiento positivos inquebrantables.

Puede que una actitud positiva no resuelva todos tus problemas, pero molestará a suficientes personas como para que merezca la pena el esfuerzo.

Las buenas actitudes de los jugadores no garantizan el éxito de un equipo, pero las malas actitudes garantizan su fracaso.

Una buena actitud es realmente importante. Y un sentido del optimismo, alguien que tenga ideas y no tenga miedo de lanzarlas sin importar su nivel. Alguien que sea proactivo. Alguien con eficacia y sentido común. No siempre van de la mano, el sentido común y, bueno, todo lo demás.

El pensamiento positivo es una buena actitud. Pero el pensamiento positivo sin ninguna habilidad no funciona.

Una actitud positiva es algo en lo que todo el mundo puede trabajar, y todo el mundo puede aprender a emplearla.

Mantener una actitud positiva te da resiliencia, o capacidad de rebote, cuando llegan los retos difíciles.

Es muy importante generar una buena actitud, un buen corazón, en la medida de lo posible. De ahí vendrá la felicidad a corto y largo plazo, tanto para ti como para los demás.

Elegir ser positivo y tener una actitud agradecida va a determinar cómo vivirás tu vida.

Puede que una actitud positiva no resuelva todos nuestros problemas, pero es la única opción que tenemos si queremos salir de los problemas.

Es nuestra actitud al comienzo de una tarea difícil lo que, más que cualquier otra cosa, afectará a su resultado exitoso.

Empieza el día con buenas intenciones y prepárate para tener una buena actitud. Lo importante no es lo que te ocurre, sino cómo respondes.

Nuestras actitudes controlan nuestra vida. Las actitudes son un poder secreto que funciona las veinticuatro horas del día, para bien o para mal. Es de suma importancia que sepamos aprovechar y controlar esta gran fuerza.

La aceptación es el acto de abrazar lo que la vida te presenta con una buena actitud.

Tu actitud es la lente básica o el marco a través del cual puedes verte a ti mismo, al mundo y a otras personas. Puedes tener una actitud positiva que moldee tu vida de forma positiva.

Mantener una actitud positiva descubre las habilidades ocultas y llama a los recursos sin explotar.

Una buena actitud implica no sólo cómo vemos el mundo que nos rodea, sino también cómo interpretamos la situación, las circunstancias y las acciones de los demás.

Una actitud positiva sin interacción no tiene sentido.

Me encanta la actitud positiva porque creo que tener la actitud correcta en la vida es lo que separa a los ganadores de los perdedores: los que quieren tener éxito, de los que lo tienen.

Si hay algo que quieres cambiar en tu mundo, cambia tu actitud hacia ello.

Tu actitud puede llevarte hacia adelante o tu actitud puede llevarte hacia abajo. La elección es siempre tuya.