Skip to main content

Frases sobre Agradar

Frases sobre Agradar. Encuentra docenas de Frases sobre Agradar con fotos para copiar y compartir.

80


  • Si Dios nos envía por senderos de piedra nos proveerá de zapatos fuertes.




  • Cuanto más se agrada, generalmente menos profundamente se agrada.




  • Siempre resulta agradable que te estén esperando y no llegues.




  • Elige la mejor manera de vivir; la costumbre te la hara agradable.




  • No hables mal de otro porque oirás lo que no te agradará.




  • Aún en los mayores disgustos, siempre conservan las mujeres el deseo de agradar.




  • Una nación que quiere agradar a todos, merece ser despreciada por todos.




  • Los contratiempos de la vida son los mandatos ocultos del amor.




  • Arguye sabiduría el saber agradar cuando conviene.




  • La aflicción al placer nos liga al presente. El cuidado de nuestra salud nos suspende del porvenir.




  • Nada más fácil que agradar al pueblo, ni más difícil que agradarle durante largo tiempo: bien pronto una nueva idiotez destrona la antigua.




  • Ciertamente, es agradable ver estampado el propio nombre; un libro es siempre un libro, aunque no contenga nada.




  • El que pretenda agradar a todos en lo que hace, se incomodará y no contentará a nadie.




  • La seguridad de agradar es con gran frecuencia un medio de desagradar infaliblemente.




  • Ni sé para quién es esta amargura! Oh, sol, llévala tú que estás muriendo, y cuelga, como un Cristo ensangrentado, mi bohemio dolor sobre su pecho.




  • Es agradable ser importante, pero es más importante ser agradable.




  • El ahora es la única realidad, aunque no sea la más agradable de las realidades.




  • Las palabras verdaderas no son agradables, y las agradables no son verdaderas.




  • Tan cierto como que Dios siempre pone a sus hijos en el horno, es que él estará en el horno con ellos.




  • Escapa de los que compran lo que no necesitan, con dinero que no tienen, para agradar a gente que no vale la pena.




  • Soy el hombre más sencillo que existe, pero cuando siento un grito en mí, no acepto transformarlo en una vocecilla para complacer a los mudos y a los tartamudos. Pues yo no deseo agradar a nadie, ni tener discípulo ni ser discípulo. He venido a este mundo por algunos instantes y quiero lanzar un grito y partir. Nada más.




  • La finalidad del embustero consiste simplemente en agradar, deleitar, proporcionarnos un placer; es la base misma de la sociedad civilizada.




  • El hombre se hace feminista cuando no sabe ya cómo agradar a las mujeres. La mujer se hace feminista cuando ya no sabe cómo agradar a los hombres.




  • No sé cual es la clave del éxito, pero la clave del fracaso es intentar agradar a todo el mundo.




  • Si Dios no agrada a todos, no les voy a agradar yo.




  • Ni la belleza ni la inteligencia hacen que una mujer viva contenta con su esposo, sino la bondad de carácter, la virtud y el deseo de agradar.




  • ¡Gran Dios!, así es como han mancillado durante más de doscientos años tus altares; así es como seres razonables han creído deber honrarte; rociando tu templo con la sangre de tus criaturas, mancillándolo con horrores e infamias, con ferocidades dignas de los caníbales es como varias generaciones de hombres sobre la Tierra han creído cumplir tus deseos y agradar a tu justicia.




  • Naciste para ser feliz, no para agradar a todo el mundo.




  • La timidez se compone del deseo de agradar y del temor de no conseguirlo.




  • El arte de agradar es el arte de engañar.




  • Nunca dejes de ser lo que eres por agradar a los demás.




  • La timidez es la desconfianza del amor propio, que deseando agradar teme no conseguirlo.




  • Las mujeres pueden adornarse lícitamente para conservar la elegancia de su estado, e incluso añadir algo para agradar a sus maridos.




  • No siempre podemos agradar, pero siempre podemos tratar de ser agradables.




  • El arte de persuadir consiste tanto en el de agradar como en el de convencer; ya que los hombres se gobiernan más por el capricho que por la razón.




  • La sinceridad puede agradar cuando es usada con arte o cuando, por su rareza, no logra crédito.




  • El don de agradar de una persona es tanto menos profundo cuanto más general.




  • Querer agradar a los demás es una trampa peligrosa.




  • Lo que es dudoso o mediocre necesita del consenso para agradar a su autor; pero lo que es perfecto lleva en sí la convicción de su belleza, de su mérito.




  • Si pretendes y te esfuerzas en agradar a todos, acabarás por no agradar a nadie.