Frases de Sensatez

La sabiduría del sabio no es más que sentido común en grado poco común.

Vivir es soñar; ser juicioso es soñar agradablemente.

El sentido común, que es la barrera de los sueños.

La inteligencia y el buen sentido se abren camino sin necesidad de artificios.

Si fuéramos siempre juiciosos, rara vez tendríamos necesidad de ser virtuosos.

Apenas concedemos patentes de sensatez más que a aquellos que son de nuestra misma opinión.

El sentido común rara vez nos lleva muy descaminados.

Sentido común lo puede tener cualquiera, con tal de que no tenga imaginación.

Dos cosas son perjudiciales a quien pretende escalar las alturas de la fortuna: Callar cuando es hora de hablar y hablar cuando es tiempo de callar.

Hablar cuerdamente es con frecuencia difícil; pero cuerdamente callar lo es más todavía.

Sean tus palabras mejores que tu silencio; de lo contrario, calla.

Calla, o que tus palabras valgan más que tu silencio.

Aquel es cercano a Dios que sabe callar con razón.

Debemos proponernos ser siempre sinceros en nuestras palabras, porque siguiendo invariablemente esta línea de conducta nos elevaremos ante nuestros ojos y nos haremos sensatos.

Lo que principalmente da valor a la vida del hombre es poseer un juicio sereno y una constante y buena disposición para el trabajo.

Nunca es bueno hacer las cosas sin haber previsto antes todos los movimientos probables de la partida, sin haber calculado todas las posibilidades.

El hombre juicioso no busca vengarse de sus enemigos; deja este cuidado a la vida.

Sólo los necios dicen todo a todo el mundo; la verdad no aprovecha más que a aquellos que saben hacer buen uso de ella.

Todos podemos perderlo todo en cualquier momento, sólo nuestro sentido común, nuestro conocimiento, puede ayudarnos a sobrevivir.

Cualquier persona tomada como individuo es razonablemente sensata y moderada; si forma parte de una multitud, se convierte de inmediato en un bruto.

Es adecuado que experimentemos momentos de miedo que nos permitan actuar con cautela y no ser unos insensatos.

Cualquier hombre de setenta años sensato debería estar orgulloso de tener una mujer como ella. Aunque, claro ¿dónde se encontraba un hombre sensato, a ésa o a cualquier otra edad?

El amor es así, como el fuego; suelen ver antes el humo los que están fuera que las llamas los que están dentro.

Un hombre no debe creer en más cosas de las que puede digerir.

Mala cosa cuando en el ánimo se representa la temeridad con rostro de valentía, y la cordura con rostro de cobardía.

No es sabio el que sabe donde está el tesoro, sino el que trabaja y lo saca.

El tiempo libra a los necios de la aflicción, y del buen juicio a los sanos.

La palabra una vez hablada, vuela y no torna.

No basta tener buen ingenio; lo principal es aplicarlo bien.

O calla o algo di que mejor que callar sea.

Si una persona parece cuerda es sólo porque sus locuras son proporcionadas a su edad y estado.

La felicidad es la certeza de no sentirse perdido.

Vale más un céntimo bien empleado que un céntimo ahorrado.

El amor propio, al igual que el mecanismo de reproducción del genero humano, es necesario, nos causa placer y debemos ocultarlo.

Ser consciente de la propia ignorancia es un gran paso hacia el saber.

Si no está en nuestro poder el discernir las mejores opiniones, debemos seguir las más probables.

Es una enorme desgracia no tener talento para hablar bien, ni la sabiduría necesaria para cerrar la boca.

Toda reforma impuesta por la violencia no corregirá nada el mal: el buen juicio no necesita de la violencia.

Me atreveré a todo lo que pueda hacer un hombre. Quien se atreva a más es insensato.

En aquellos días aprendí dónde hay que interrumpir la discusión para que no se transforme en embuste y dónde ha de empezar la resistencia para salvaguardar la libertad.