Frases Ovidio

En los campos ajenos, la cosecha siempre es más abundante.

El duelo suprimido sofoca. Hace estragos dentro del pecho y está forzado a multiplicar su fuerza.

La envidia, el más mezquino de los vicios, se arrastra por el suelo como una serpiente.

Nada es más útil al hombre que aquellas artes que no tienen ninguna utilidad.

Felices son aquellos que se atreven con coraje a defender lo que aman

Todo amante es un guerrero.

Feliz es el hombre que ha roto las cadenas que dañan su mente, y ha abandonado de una vez por todas la preocupación.

A menudo la espina produce tiernas rosas.

Es natural en un hombre pobre el contar su rebaño.

La abundancia me hizo pobre.

A los hombres no les mueve el mérito de la buena acción si no lleva tras sí el premio.

El alma descansa cuando echa sus lágrimas; y el dolor se satisface con su llanto.

El que persigue ayudado por las alas del Amor es más veloz y no necesita descanso.

Tómate un descanso; un campo que ha descansado da una cosecha generosa.

Sé paciente y duro, algún día ese dolor será útil para ti.

Todas las cosas pueden corromper cuando las mentes son propensas al mal.

Una mala causa empeora cuando se pretende defenderla.

Un rostro silencioso con frecuencia expresa más que las palabras.

El goteo del agua hace un hueco en el agua, no por la fuerza, sino por la persistencia.

El tiempo es generalmente el mejor médico.

Mil enfermos requieren mil curas.

La fortuna y el amor favorecen al valiente.

Ofrecer amistad a quien pide amor es como ofrecer pan al que se muere de sed.

La gota horada la piedra, no por su fuerza, sino por su constancia.

Soporta y persiste; el dolor presente ha de serte de provecho en mejor ocasión.

No se desea lo que no se conoce.

Todo género de vida, sin descansos alternativos, no es duradero.

La gota horada la piedra, no por su fuerza, sino por su constancia. Soporta y persiste; el presente ha de serte de provecho en mejor ocasión.

Las oraciones de los cobardes desprecian la fortuna.

Un mandatario debe ser lento para castigar y rápido para recompensar.

Un caballo nunca corre tan rápido si tiene otros caballos a los que debe de alcanzar y dejar atrás.

La libertad es el mayor de los bienes.

Hablar de la democracia y callar al pueblo es una farsa. Hablar de humanismo y negar a los hombres es una mentira.

El hombre que ha experimentado un naufragio, se estremece incluso ante el mar en calma.

Soporta y resiste: ese esfuerzo te será muy útil un día.

Por el camino de en medio irás siempre muy seguro.

Para agradar debes olvidarte de ti mismo.

Si no hubiera pecado, ¿qué me quedaría para perdonar? Mi destino te ha dado la oportunidad de tener piedad.

La astucia conduce a la picardía. Es sólo un paso de uno a otro, y eso es muy resbaladizo. Solo mentir hace la diferencia; agregue eso a la astucia, y es picardía.

Una herida tal vez se vuelva tolerable con el tiempo; pero las heridas que están abiertas se estremecen con el toque de las manos.