Osho Frases

Fue el líder de un movimiento espiritual de origen indio.

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Si intentas demasiado cambiar el exterior, eso muestra que todavía estás apegado. Si un hombre intenta separarse, muestra apego. ¿Por qué preocuparse por el desprendimiento si no estás apegado?
Todas nuestras miserias no son más que apego. Toda nuestra ignorancia y oscuridad es una extraña combinación de mil y un apegos.
El amor es feliz cuando es capaz de dar algo. El ego es feliz cuando puede tomar algo.
La vida no es una tecnología, ni una ciencia. La vida es un arte, has de sentirla. Es como el caminar por una cuerda floja.
Los sentidos llevan comúnmente fragmentos de conocimientos. Se sabe que las personas que son compasivas, del corazón, tienen cierta sabiduría, percepción, intuición que no puede ser enseñada. Ellos pueden ver cosas, sentir cosas. Son sensibles a cosas que no son viables a la mente.
El amor es un fenómeno espiritual; el deseo es un fenómeno físico. El ego es un fenómeno psicológico; el amor es espiritual. Tendrás que aprender el alfabeto del amor. Tendrás que empezar desde el principio, desde cero; de lo contrario te sentirás herido continuamente. Y recuerda, solo tú puedes ayudarte a ti mismo; no hay nadie más que sea responsable.
Si puedes ser espontáneo, entonces no hay necesidad de cualquier religión, la vida se vuelve en sí misma en la religión.
En el momento en que te conoces a ti mismo, has conocido la cosa más preciosa que existe.
Respétate a ti mismo, ámate a ti mismo, porque nunca ha existido una persona como tú y nunca más lo habrá.
En el momento en que te aceptas a ti mismo, te vuelves hermoso.
Si te amas a ti mismo, amas a los demás. Si te odias a ti mismo, odias a los demás.
La meditación te traerá cada vez más inteligencia, inteligencia infinita, una inteligencia radiante. La meditación te hará más vivo y sensible; tu vida se hará más rica.
El intelecto convierte todo en un problema y no conoce ninguna solución. El instinto nunca crea ningún problema ni necesita ninguna solución; funciona naturalmente.
Haz caso a tu instinto, escucha a tu cuerpo, escucha a tu corazón, a tu inteligencia. Confía en ti mismo, ve donde te lleve tu espontaneidad, de ese modo no fracasarás. Si sigues la corriente de tu vida natural de forma espontánea, un día, inevitablemente, llegarás a las puertas de lo divino.