Frases de Nelson Mandela

Mandela era abogado, líder rebelde y presidente de Sudáfrica, considerado el líder más importante de África Negra, ganador del Premio Nobel de la Paz y padre de la moderna nación sudafricana.

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Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel o su origen, su sexualidad o su religión. Si pueden aprender a odiar, se les puede enseñar a amar, porque el amor es más natural para el corazón humano que su opuesto.
Cuando el agua ha empezado a hervir, apagar el fuego ya no sirve de nada.
Es tan fácil quebrantar y destruir. Los héroes son aquellas personas que crean paz y construyen.
Me he jubilado, pero si hay algo que me mataría es despertar en la mañana sin saber qué voy a hacer.
Superar la pobreza es la protección de un derecho humano fundamental: el derecho a la dignidad y a la vida decente.
Negar a la gente sus derechos humanos es desafiar su propia humanidad.
Nunca, nunca y nunca otra vez, debería ocurrir que esta tierra hermosa experimente la opresión de una persona por otra.
Un luchador por la libertad aprende, por el camino más duro, que es el opresor el que define la naturaleza de la lucha.
Había perdido dignidad ante mis amigos. Aunque había sido derribado por un burro, aprendí que humillar a otra persona es hacerle sufrir un destino innecesariamente cruel. Incluso siendo un niño, intentaba derrotar a mis oponentes sin deshonrarles.
Nunca subestimes tu propio poder; Siempre tienes la capacidad de lograr lo imposible.
La verdad es el primer paso hacia la libertad.
No hay nada más liberador que el acto de perdonar. Perdonar a los demás, nos permite sanar nuestras heridas internas.
Los grandes logros nacen del coraje para afrontar los desafíos que nos impiden alcanzar nuestros objetivos.
Todos somos iguales en dignidad y derechos.
El camino hacia la libertad comienza con la elección de mantener tu propia dignidad.
Las oportunidades surgen del cambio y los imprevistos.