Frases de Laurence Sterne

La ciencia se puede aprender de memoria, pero la sabiduría no.

El respeto por nosotros mismos guía nuestra moral; el respeto por otros guía nuestras maneras

Dos amantes se enamoraron con frecuencia por cualidades que no tienen, y se separan por defectos que tampoco tienen.

Solamente aquellos espíritus verdaderamente valerosos saben la manera de perdonar. Un ser vil no perdona nunca porque no está en su naturaleza.

Solo los valientes saben perdonar … un cobarde nunca perdonó; No está en su naturaleza.

Que una sonrisa pueda añadir un hilo a la trama sutil de la vida.

Se conoce como perseverancia cuando se realiza una buena causa, mientras que en una mala causa se conoce como obstinación.

En todos los actos despiadados, el peor de los hombres pagan este cumplido, al menos, a la humanidad, como la de tratar de llevar la mayor cantidad de la aparición de la misma, según sea el caso será así allá ellos.

Los hombres se cansan en busca de descanso.

El afán de conocimiento, como la sed de riquezas, aumenta siempre con su adquisición.

Un hombre que valora una buena noche de descanso no se acostará con enemistad en su corazón, si puede evitarlo.

El noviazgo consiste en una serie de atenciones silenciosas, no tan señaladas como alarma, ni tan vagas como para no ser entendidas.

Estoy firmemente convencido de que un hombre que no sienta cierto afecto por la totalidad del otro sexo es incapaz de amar a una sola de sus componentes como es debido.

La manera más lograda de usar libros es para servirles como algunas personas hacen a señores; conocer sus títulos y luego presumir de su posesión.

Cuando la temeridad tiene éxito, pasa a llamarse heroísmo.

Amamos a otros no tanto por el bien que nos han hecho, sino por el bien que nosotros les hicimos.