Frases de José Ortega y Gasset
-
-
-
-
-
-
El propósito de la pintura no es más que darnos una visión más plena, más completa de los objetos que la lograda en nuestro trato cotidiano con ellos.
-
La forma que en política ha representado la más alta voluntad de convivencia es la democracia liberal.
-
-
-
Una buena parte de los hombres no tiene más vida interior que la de sus palabras, y sus sentimientos se reducen a una existencia oral.
-
No hay amor sin instinto sexual. El amor usa de este instinto como de una fuerza brutal, como el bergantín usa el viento.
-
-
-
Este es el mayor peligro que hoy amenaza a la civilización: la estatificación de la vida, el intervencionismo del Estado, la absorción de toda espontaneidad social por el Estado; es decir, la anulación de la espontaneidad histórica, que en definitiva sostiene, nutre y empuja los destinos humanos.
-
-
-
El liberalismo es la suprema generosidad: Es el derecho que la mayoría otorga a la minoría aunque ese enemigo sea débil.
-
-
-
La juventud necesita creerse, a priori, superior. Claro que se equivoca, pero este es precisamente el gran derecho de la juventud.
-
Lo característico del momento es que el almavulgar, sabiéndose vulgar, tiene el denuedo de afirmar el derecho de la vulgaridad y lo impone dondequiera.
-
Algunas personas enfocan su vida de modo que viven con entremeses y guarniciones. El plato principal nunca lo conocen.
-
El individuo no puede orientarse en el universo sino a través de su raza, porque va sumido en ella como la gota en la nube pasajera.
-
-
La rebelión sentimental de las masas, el odio a los mejores, la escasez de éstos -he ahí la razón verdadera del gran fracaso hispánico.
-
-
-
-
-
Ser de la izquierda es, como ser de la derecha, una de las infinitas maneras que el hombre puede elegir para ser un imbécil: ambas, en efecto, son formas de la Hemiplejía moral.
-
El enamoramiento es un estado de miseria mental en que la vida de nuestra conciencia se estrecha, empobrece y paraliza.
-
Empezando por la Monarquía y siguiendo por la Iglesia, ningún poder nacional ha pensado más que en sí mismo.
-
Todos los empleados públicos deberían descender a su grado inmediato inferior, porque han sido ascendidos hasta volverse incompetentes.
-
La ciencia, el arte, la justicia, la cortesía, la religión son órbitas de la realidad que nos invaden bárbaramente nuestra persona como hace el hambre y el frío; sólo existen para quien tiene voluntad de ellas.
-