Frases de Gracias Dios

Dios, te doy gracias por la vida que me has dado y por el camino que me has guiado.

Gracias Señor, por darme fuerza para afrontar los desafíos y resistir los momentos difíciles.

Encontramos consuelo y ánimo en estas palabras y promesas bíblicas, especialmente cuando estamos pasando por momentos difíciles en nuestras vidas. Estas frases también nos ayudan a tener una relación más cercana con Dios, mientras le damos gracias por todo lo bueno que tenemos. Agradecer a Dios por todas las bendiciones que nos ha otorgado es una de las mejores maneras de mostrar nuestra gratitud y alabanza. Con estas frases de agradecimiento a Dios podrás expresarle tu profunda gratitud por todo lo que Él ha hecho en tu vida.

Alabemos a Dios porque siempre nos da lo que necesitamos en el momento preciso.

Señor, muchas gracias por ofrecerme la oportunidad de crecer espiritualmente cada día.

Que bendición tan grande contar con un Dios misericordioso que siempre está a mi lado.

Te agradezco Señor, por tus numerosas bendiciones y milagros en mi vida.

Gracias Señor, por esta maravillosa oportunidad de aprender más sobre ti y tu amor incondicional.

Reconozco que eres el único Dios justo, bondadoso y misericordioso. Muchas gracias por tu infinita sabiduría.

Agradezco cada momento de mi vida como un regalo especial de Ti.

Gracias Señor, por permitirme compartir tus promesas con otros.

Dios, gracias por la dicha que siento al celebrar que estás en mi vida. Eres mi todo.

Gracias Dios por darme la energía que alimenta mi alma, el Sol que calienta nuestros cuerpos y el aire que llena nuestros pulmones.

Gracias Dios por no odiarme cuando he sido desagradecido, cuando he sido grosero contigo o cuando mi fe se ha tambaleado.

Te doy gracias Dios por este día tan maravilloso, por el verdor de los árboles, por un cielo azul verdaderamente de ensueño y por todo lo que es natural y que es infinito.

Gracias Dios por mandarme personas que cuiden de mí.

Gracias Dios por protegerme de lo que pensé que quería y por bendecirme con lo que no sabía que necesitaba.

Simplemente doy gracias a Dios por todas sus bendiciones.

Gracias Dios por darme fuerzas para seguir adelante.

Por mi vida, por la felicidad que me dan mis hijos, y por todo lo que conozco, te agradezco Dios.

Señor, gracias por darme un nuevo día lleno de salud, dicha y felicidad.

Gracias por darme mi vida Dios, por permitirme levantarme una vez más y ver a mis seres queridos. Gracias por hacerme ver que nunca es tan tarde para cambiar, y en tanto te tenga a mi lado, las cosas cambiarán para bien.

Gracias Señor por otro hermoso día. Por abrir mis ojos y mis oídos para ver y escuchar todo lo bueno que has dejado para nosotros en este mundo. Por favor enséñame más.

Querido Dios, nunca podré agradecerte lo suficiente por siempre estar aquí para mí.

En mis malos días te busco, en mis buenos días te agradezco, y en mis días grandiosos te alabo, pero todos los días te necesito. Gracias Dios por estar siempre aquí conmigo.

Gracias Dios por todas las bendiciones que nos das a mí y a mi familia. Gracias por la fuerza que me das todos los días y por las personas que me rodean y que le dan un mayor significado a mi vida.

Estoy agradecido, Señor, por todos lo que dejas que se crucen en mi camino. Estoy agradecido por las decisiones que me has permitido tomar y por las lecciones que derivaron de esas decisiones.

Cuando despierto todas las mañanas, le agradezco a Dios por cada nuevo día.

Gracias por las miles de oportunidades que me has dado Dios.

Gracias Dios por darme salud, por los alimentos que me das y por la concientización que has creado en mí.

Padre, gracias por siempre sonreír y tener tus brazos abiertos para recibir de regreso al pecador en tus brazos. Gracias por la dicha que me trae estar a tu lado.

Estimado Dios, gracias por el hoy, el ayer, y el mañana. Gracias por mi familia, mis alegrías y mis penas. Gracias por todo lo que me ha hecho más fuerte.

Si no agradeces a Dios por cada sonrisa, entonces no tienes derecho a culparlo de cada lágrima.

Gracias Dios por dejarme vivir un día más. Cuida de mi familia y mis amigos. Bendícelos de una manera que nunca antes hayan conocido.

Querido Dios, desde el fondo de mi corazón quiero agradecerte por siempre estar ahí para mí, por nunca dejarme y por siempre amarme.

Gracias Dios por siempre estar dentro de mi corazón y por consolarme en las noches solitarias.

Gracias Dios por inspirarme a ser una mejor persona.

Querido Señor, te agradezco por la gracia de estar vivo esta mañana. Te agradezco por todo el bien que tengo en mi vida y por la oportunidad de tener un nuevo comienzo.

Gracias Dios por siempre guiarme en la dirección correcta y por saber lo que es mejor para mí , incluso más que yo.

Nunca terminaré de agradecerte, Dios, por hacerme una persona tan confiable y comprometida. Solo a ti te seré fiel por siempre. Gracias por todo, Dios, especialmente por mi felicidad y la de aquellos que me rodean.

Mi vida no me alcanzaría para agradecerte por todos los momentos felices que he pasado con mi familia. Gracias Dios, por darme tanto que vivir con ellos y por lo maravillosa que es mi vida.