Frases de Besos

Y sin embargo, cada hombre mata lo que ama. Que todos oigan esto, unos lo hacen con una mirada torva, otros con la palabra halagadora; el cobarde lo hace con un beso, con la espada el valiente.

Regaría con mis lágrimas las rosas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos.

Las frases de besos siempre han sido una forma perfecta para expresar afecto, amor y cariño. Se trata de un lenguaje universal que todos entienden y que nos permite expresar nuestros sentimientos hacia la otra persona. Estas frases pueden ser usadas para manifestar tu amor por alguien especial y declarar tu deseo de estar con él o ella.

Un beso es un secreto que se dice en la boca y no en los oídos.

¡Todo el mar no bastó para dejar sin huella el breve trigo que dejó tu beso!

¡Qué hermoso es ver el día coronado de fuego levantarse, y a su beso de lumbre brillar las olas y encenderse el aire!

Y en la dulcísima calma, de tu armónico embeleso, sentirás el tierno beso…De quien por vida te ama.

Cada beso llama otro beso. ¡Con qué naturalidad nacen los besos en esos tiempo primeros del amor! Acuden apretándose unos contra otros; y tan difícil sería cortar los besos que se dan en una hora, como las flores de un campo en el mes de mayo.

Ya lo sabes sin tropos ni bengalas la traducción mejor es boca a boca en el beso bilingüe van circulando dulces noticias.

Callad, amantes, y ocupad el labio con el beso. No pronunciéis palabras vanas mientras se busca vuestro corazón en otro pecho, jadeante y pobre como el vuestro, ya al filo de la aurora.

La mejor definición del amor no vale un beso de una joven enamorada.

Y me besó. Fue el tipo de beso del que nunca podría hablar en voz alta a mis amigos. Fue el tipo de beso que me hizo saber que nunca había sido tan feliz en toda mi vida.

Soy prisionero del beso que nunca debiste darme.

El tiempo pasa, nos vamos poniendo viejos y el amor no lo refleja, como ayer. En cada conversación, cada beso, cada abrazo, se impone siempre un pedazo de razón.

Tengo sed otra vez, amado mío. Dame tu beso fresco tal como una piedrezuela del río.

¿Puede un beso abrir la eternidad? ¿puede la pasión envenenar?. ¿Podrá un corazón tanto aguantar? ¿podrá la vida seguir después de amar así?.

Besa mi boca, más dime qué es lo que mi corazón busca.

Binomio es el beso que sabe a muerte.

—Bésame como nunca —le insté atrayendo sus ojos con la mirada—. Dame un beso que me acompañe hasta que vuelva a verte.

¿Cuál es tu oferta? En serenidad sellaré con un beso tu corazón...

No hay beso que no sea principio de despedida, incluso el de llegada.

Beso tu beso deteniendo el tiempo a ver si se detiene aquí la vida.

Quiero besarte, no tienes que besarme si no quieres, pero yo lo haré...

Disculpa mientras beso el cielo.

Prefiero querer a poder, palpar a pisar, ganar a perder, besar a reñir, bailar a desfilar y disfrutar a medir. Prefiero volar a correr, hacer a pensar, amar a querer, tomar a pedir. Antes que nada soy partidario de vivir.

El amor es un beso, dos besos, tres besos, cuatro besos, cinco besos, cuatro besos, tres besos, dos besos, un beso y ningún beso.

El Rock and Roll es ridículo. Es absurdo. En el pasado, U2 intentaba eludir esto. Ahora, lo abrazamos y le damos un gran beso.

El beso del amor ahogó la voz de la razón.

En Hollywood te pagan mil dólares por un beso y cincuenta centavos por tu alma.

El beso es un paréntesis sin nada dentro. – Ramón Gómez de la Serna

El primer beso puede ser tan temible como el último.

Y si no podemos vibrar con la magia de un beso porque nos puede el instinto... ¿Qué será del amor?

Me gustas cuando callas porque estás como ausente, y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. Parece que los ojos se te hubieran volado y parece que un beso te cerrara la boca.

Sé valiente. En la vida, en el amor y en el sexo. La gente olvida que debe pedir caricias y besos. Una caricia, un beso, solicitar el calor de una mano en el ombligo no deben ir acompañados con el sentimiento de que eso provocará o derivará en sexo.

El beso es el contacto de dos epidermis y la fusión de dos fantasías.

Yo quisiera ¡y no puedo! Ser como son los otros, los que pueblan el mundo y se llaman humanos: siempre el beso en el labio, ocultando los hechos y al final… El lavarse tan tranquilos las manos.

El pan se entra en todo: en el aceite, en el gazpacho, en el queso y la uva, para dar sabor a beso, en el vino, en el caldo, en el jamón, en él mismo, pan con pan. También solo, como la esperanza, o con una ilusión...

Te lo juro por el Ángel. —Agachó la cabeza, le dio un beso en la mejilla—. Al infierno con eso. Lo juro por nosotros.

¡Los poetas amamos a la sangre! A la sangre encerrada en la botella del cuerpo, no a la sangre derramada por los campos, ni a la sangre derramada por los celos, por los jueces, por los guerreros; amamos a la sangre derramada en el cuerpo, a la sangre feliz que ríe por las venas, a la sangre que baila cuando damos un beso.

Ojos, mirad por última vez. Brazos, dad vuesto último abrazo. Y labios, que sois puertas del aliento, sellad con un último beso.

El tiempo se puede enfermar cuando viene el aburrimiento en la pareja. Si enfermase el tiempo entre los dos, el beso no sería lo mismo, el beso no sabría que hacer, a que boca fresca mi beso besaría si enfermase el tiempo.