Frases de Benjamín Franklin

Fue uno de los líderes de la Revolución Americana, conocido por sus citas y experiencias con la electricidad. También fue el primer embajador de Estados Unidos en Francia.

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El contenido hace que los hombres pobres ricos, el descontento hace que los ricos pobres.
Observe que todos los hombres, la mayoría a ti mismo.
Nueve de cada diez son hombres serían suicidios.
Es la gente trabajadora la que es feliz. Es la gente ociosa la que es miserable.
No malgastes tu tiempo, pues de esa materia está formada la vida.
Incluso la paz se puede comprar a un precio demasiado alto.
Sin continuo crecimiento y progreso, tales palabras como mejora, logro y éxito no tienen significado.
El corazón del loco está en la boca; pero la boca del sabio está en el corazón.
Amad a vuestros enemigos, porque os dirán vuestros errores.
El que se enorgullece de sus conocimientos es como si estuviera ciego en plena luz.
El orgullo desayunó con la abundancia, cenó con la pobreza y cenó con la infamia.
Para tener éxito, salta tan rápidamente a las oportunidades como lo haces a las conclusiones.
Ir temprano a la cama y levantarse temprano, hace a un hombre saludable, rico y sabio.
El tiempo perdido nunca se recupera de nuevo.
La madrugada tiene oro en la boca.
Ser un ignorante no es una vergüenza, pero no estar dispuesto a aprender si lo es.
La tragedia de la vida es que nos hacemos viejos demasiado pronto y sabios demasiado tarde.
El orgullo que se alimenta con la vanidad acaba en el desprecio.
Más fácil es reprimir la primera codicia que satisfacer la próxima.
Ser humilde para con los superiores es un deber; para con los iguales, una muestra de cortesía; para con los inferiores, una prueba de nobleza.
El hombre prudente no se vale jamás de la palabra para el sarcasmo ni para la difamación.
La originalidad es el arte de ocultar tus fuentes.
En los tratos entre los hombres la verdad, la sinceridad e integridad son de mayor importancia para la felicidad en la vida.
¿Amas la vida? Pues no desperdicies el tiempo, porque es la sustancia de la que está hecha.
Un ahora vale más que dos mañanas.
El pecado no es dañino porque está prohibido, sino que está prohibido porque es dañino.
Un poco de negligencia puede engendrar un gran daño.
No arroje piedras a sus vecinos si sus propias ventanas son de vidrio.
Esté en guerra con sus vicios, en paz con sus vecinos, y permita que cada año nuevo encuentre un hombre mejor.
Ama a tu vecino; pero no derribes tu cobertura.
En general, la humanidad, desde la mejora de la cocina, come el doble de lo que la naturaleza requiere.
Recuerde no solo decir lo correcto en el lugar correcto, sino que es mucho más difícil aún, dejar sin decir lo incorrecto en el momento tentador.
Para obtener el mejor rendimiento de tu dinero, vierte tu cartera en tu cabeza.
Una larga vida puede no ser lo suficientemente buena, pero una buena vida es lo suficientemente larga.
El corazón de un necio está en su boca, pero la boca de un hombre sabio está en su corazón.
Si deseas muchas cosas, muchas cosas te parecerán pocas.
Es mucho más fácil suprimir un primer deseo que satisfacer los siguientes.
Deja que la primera lección del niño sea la obediencia, y la segunda será lo que quieras.
No hay ganancias, sin dolores.
Un hombre puede ser más astuto que otro, pero no más astuto que todos los demás.