Frases Cursis

Cuando estoy lejos de ti, siento que no puedo vivir.

Ni la ausencia ni el tiempo son nada cuando se ama.

Eres la fuerza de mis latidos, el pensar de mi mente, la fuerza de mis músculos y ante todo, la razón de mi vida.

Nunca pienses que puedes tener el control sobre el curso del amor, ya que el amor, si te encuentra digno, dirigirá tu curso.

Trátame como un ángel y yo me encargo de que toques el cielo.

Puede que no tengas mis ojos o mi sonrisa, pero desde el primer momento tuviste mi corazón.

Te amo con pasión, con miedo y con locura.

Tus ojos son como estrellas que brillan solas en la inmensa oscuridad, tus labios son como las estrellas que veo en el cielo y no puedo tocar, y lo irónico de esto es que tú haces que llegue más allá de las estrellas.

En una escala del uno al diez: tú eres un nueve y yo soy el uno que te falta.

Somos dos enamorados en busca de un corazón, más son dos ilusiones que van a la perdición.

Mis ojos lloran por verte, mis brazos por abrazarte, mi boca por darte un beso y mi corazón por amarte.

Sin ser chocolate, eres dulce. Sin ser un peluche, eres tierna. Sin ser modelo, eres hermosa. Habiendo millones, para mí eres la única.

Ámame y el mundo será mío.

Si tan solo pudiera explicarte lo que me pasa con vos, no me olvidarías nunca, solo por haber tenido mi amor.

¿Eres un pastel? Porque me gustaría tener una rebanada de ti.

El amor es como un violín. La música podrá detenerse ahora y después, pero las cuerdas lo recordarán por siempre.

Tiremos una moneda, si sale cara tú eres mía, pero si sale cruz yo soy tuyo.

No estaba buscando nada, pero te vi y lo encontré todo.

Aunque la distancia nos separe no me daré por vencida, el tiempo corre y las personas también, pero tenemos que darnos prisa para alcanzar lo que deseamos.

Hazme de todo, menos falta.

Preferiría compartir toda una vida contigo que enfrentarme solo a todas las eras de este mundo. -Liv Tyler.

Mi lugar favorito es en tus brazos.

Me dijeron que para enamorarte tenía que hacerte reír, pero ahora cada vez que te ríes, quien se enamora soy yo.

Unos quieren el mundo, otros quieren el sol, yo solo me conformo con un lugar en tu corazón.

El amor comienza cuando “lo tuyo” y “lo mío”, se transforma en “lo nuestro”.

Mi credo es el amor, y tú eres su único dogma.

Cuando los pingüinos encuentran a su pareja, se quedan con ella el resto de sus vidas. ¿Serías mi pingüino?

Existen siete mil millones de sonrisas en este mundo, y la tuya es mi favorita.

Quizás otro te quiera y te ofrezca su corazón, pero ninguno como yo lo hará sin condición.

Érase una vez nosotros. Yo me volví tuyo y tú te volviste mía. Y nos quedaremos juntos por siempre sin importar si compartimos lágrimas o risas. Porque a eso es lo que le llaman un felices para siempre.

Quisiera ser caramelo para pegarme en tus labios y deshacerme en tu boca.

Y es que sin buscarte, te encuentro por todos lados, especialmente cuando cierro los ojos.

He amado hasta llegar a la locura; y eso a lo que llaman locura, para mí es la única forma sensata de amar.

Eres mi hogar y mi aventura, todo en uno.

Anoche soñé contigo y era como un cuento de hadas, tú eras mi príncipe azul y yo tu princesa encantada.

Siempre existe algo de locura en el amor. Pero también siempre existe algo de razón en la locura.

Hoy sentí en mi cuerpo la necesidad de conocer tus sueños, y recorrer cada elemento, que en tu cuerpo yo contemplo.

Bésame cada amanecer como si fuera la primera vez, y cada anochecer como si fuera la última.

Después de conocerte supe lo hermoso que es el paraíso.

Si existe un paraíso debe de parecerse a tu mirada.