Un hombre no puede abandonar el hábito
Un hombre no puede abandonar el hábito del pecado si no primero obtiene enemistad hacia el pecado. Porque la confesión del pecado es la causa de la verdadera humildad.
Te pueden interesar también
Un hombre no puede abandonar el hábito del pecado si no primero obtiene enemistad hacia el pecado. Porque la confesión del pecado es la causa de la verdadera humildad.