Puedo perdonar a quien me haya hecho daño inconscientemente, pero a quien me lo haga conscientemente: ni olvido, ni perdón. — Alvaeno
Puedo perdonar a quien me haya hecho daño inconscientemente, pero a quien me lo haga conscientemente: ni olvido, ni perdón.
Interpretacion
La frase distingue entre el daño causado sin intención, que puede merecer perdón, y el daño intencional, que rompe la confianza de forma irreparable. Refleja una postura firme sobre límites personales y justicia emocional. Expresa la importancia de la intención en las relaciones humanas. Sugiere que el perdón no debe ser automático ante actos deliberados.
Temas
perdón memoria traición intención límites justicia emocional confianza
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