Frases de Adam Smith - No es por la benevolencia del carnicero,
No es por la benevolencia del carnicero, del cervecero y del panadero que podemos contar con nuestra cena, sino por su propio interés.
Frases de Adam Smith
La diferencia entre dos personas totalmente distintas, como por ejemplo un filósofo y un vulgar mozo de cuerda, parece surgir no tanto de la naturaleza como del hábito, la costumbre y la educación.
La gran ambición, el deseo de superioridad real, de liderar y dirigir, parece ser todo peculiar al hombre, y el habla es el gran instrumento de la ambición.
La disciplina real y efectiva que se ejerce sobre un trabajador es la de sus clientes. Es el miedo a perder su empleo lo que restringe sus fraudes y corrige su negligencia.
Muchas personas pasan por nuestra vida, pero sólo muy pocas llegan a ocupar un gran lugar en nuestro corazón.