Frases de Preocupaciones

Cuando no se comparten las mismas preocupaciones, no se comparten los mismos placeres.

Lo que nos paraliza no es que ocurra algo, sino el miedo a que pueda ocurrir.

Lo que desmejora no es la ansiedad, sino las preocupaciones y el arrepentimiento.

Antes tenía fobia a madurar. Pero cuando aprendí que madurar es dejar de sufrir por amor para sufrir por dinero, ahora le tengo terror. Tengo la cartilla a menos dos euros.

El pasado te hará sentir culpable y el futuro, preocupado.

¡qué felices deben de ser las personas que viven en ellas, que no necesitan preocuparse del mañana!

Preocuparse es la forma correcta de ver la vida. La vida es preocupante.

Comprarla a cambio de demasiadas preocupaciones es perder la vida.

Preocuparse constantemente de la propia infelicidad resulta agotador.

No se angustien por el mañana, el cual tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus problemas.

La música constituye el mejor alivio para un hombre preocupado. Gracias a ella el corazón vuelve a estar contento, se reconforta y se renueva.

La única manera de mantener una módica suma de felicidad en esta vida, es no preocuparse por el futuro ni lamentarse por el pasado demasiado.

Que el porvenir no te perturbe; tú lo abordarás, si es necesario, munido de la misma razón que empleas para el presente.

Feliz es el hombre que ha roto las cadenas que lastiman la mente, y ha dejado de preocuparse de una vez por todas.

El mayor azote de la vidamoderna es tener que dar importancia a cosas que, en realidad, no la tienen.

Lo mejor que puede pasarte a partir de cierta edad es tener buena comida en la mesa, buenos dientes para comerla y pocas preocupaciones cuando te vas a dormir por la noche.

Los hombres que se acostumbran a preocuparse por las necesidades de unas máquinas, se vuelven insensibles respecto a las necesidades de los hombres.

Los deseos conducen a la permanente preocupación y decepción, ya que todo lo que se desea de este mundo es miserable y corrupto.

No puedes empezar a preocuparte por lo que va a suceder. Tienes que obtener espástica suficiente como para preocuparse por lo que está sucediendo ahora.

En un momento dado, comprendí que no hacía falta cargar la vida con un peso excesivo... Y, afortunadamente, lo comprendí bastante pronto.

Pero la mente requiere alguna relajación, ya que no puede siempre su inclinación hacia la preocupación y la faena.

Yo no quiero ser ese tipo de personas que se la pasan pensando en el qué dirán.

Cuando un hombre empieza a pensar en que va a morir, le entra miedo y preocupación por cosas por las que antes no le entraban.

Es la preocupación por las posesiones, más que ninguna otra cosa, lo que evita que el hombre viva noble y libremente.

La verdad es que a medida que envejecemos matamos a quienes nos aman a fuerza de preocupaciones, a fuerza de esa ansiosa ternura que inspiramos en ellos y que de continuo despertamos.

Admiro a la gente que vive sin problemas, que mira el mundo con despreocupación. A diferencia de ellos, yo sufro más de la cuenta.

No te abrumes, el mundo pesa demasiado para que lo cargues sobre tu espalda.

Si andas enredado en pleitos, no es posible que tengas un corazón sosegado ni tranquilidad de ánimo; tus pensamientos serán tu verdugo interior.

¡Oh!, bálsamo precioso del sueño, alivio de los males, cómo te agradezco que acudas a mí en los momentos de necesidad.

Las preocupaciones son elixir de vida y también panacea contra el aburrimiento.

Antes o después, a todos nos llega en esta vida un demonio propio que nos persigue y atormenta y al final de cuentas hemos de luchar contra él.

Una gran diferencia entre los países desarrollados y los que no lo son, radica en las cosas de las cuáles se ríen sus gentes y qué cosas toman en serio.

Filosofar significa intentar responder a través de medios súper maduros a preguntas que preocupan a los niños.

La hiena ríe pues no piensa en el mañana.

Que nada te traume, que nada te turbe, todo se pasa, solo Dios basta.

La edad verdadera está en el estómago y en la cabeza. Las arrugas son tan sólo fruto de las preocupaciones y de comer mal.

Supone igual tonteríallorar porque de aquí a cien años ya no viviremos, que llorar porque no vivíamos hace cien años.

Preocuparse por la duración del coito genera dos cosas; preocupación y coito.

Lo que inquieta al hombre no son las cosas, sino las opiniones acerca de las cosas.

No hay nadie que viva tan preocupado por el dinero como los ricos, si se exceptúa a los pobres.