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Frases de William Shakespeare

Frases de William Shakespeare

William Shakespeare fue un poeta, dramaturgo y actor inglés, considerado como el mejor escritor en inglés y el dramaturgo más influyente del mundo. A menudo se le llama el poeta nacional de Inglaterra.

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  • ¿No es extraño que el deseo sobreviva tantos años a la ejecución?



  • Si el azar me quiere rey, el azar puede coronarme.



  • Sus promesas eran, como él lo era en ese entonces, grandiosas. Pero sus acciones eran, como él lo es ahora, nada.



  • Si la música es el alimento del amor, sigue tocando, dame un exceso; ese exceso, el apetito puede enfermar, y así morir.



  • Mi amor es profundo. Mientras más os doy, más tengo yo. Ambos son infinitos.



  • Escucha el hablar de mi alma. En el mismo instante que te vi, mi corazón voló a tu servicio.



  • El amor no me hace preguntas y me da eterno apoyo.



  • El amor no ve con los ojos, sino con la mente, y por ende Cúpido es pintado con los ojos vendados.



  • Sale, perseguido por un oso.



  • No pidas ni des prestado a nadie, pues el prestar hace perder a un tiempo el dinero y al amigo.



  • Nada envalentona tanto al pecador como el perdón.



  • Los cobardes mueren muchas veces antes de llegar a su muerte; los valientes sólo prueban la muerte una vez.



  • Este mundo para mí es como una tormenta duradera, que me aleja de mis amigos.



  • Buena compañía, buen vino, buena bienvenida, pueden ser buenas personas.



  • El amor no mira con los ojos, sino con la mente, y por eso Cupido alado está pintado a ciegas.



  • La sospecha siempre persigue a la mente culpable y avergonzada.



  • La tentación es el fuego que eleva la escoria del corazón.



  • La ingratitud es monstruosa; y para que la multitud fuera desagradecida, debían hacer un monstruo de la multitud.



  • Odio la ingratitud en un hombre más que la mentira, la vanidad, el balbuceo, la embriaguez, o cualquier mancha de vida cuya fuerte corrupción habita nuestra frágil sangre.



  • La dulce misericordia es la verdadera insignia de la nobleza.



  • Su naturaleza es demasiado noble para el mundo: No adularía a Neptuno por su tridente, O Jove por el poder de los truenos.



  • El amor secreto es un humo hecho con el humo de los suspiros de dos personas.



  • No tengas miedo de la grandeza. Algunos nacen grandes, algunos alcanzan la grandeza, y otros tienen la grandeza empujada sobre ellos.



  • Algunos nacen grandes, algunos alcanzan la grandeza, y algunos tienen la grandeza empujada sobre ellos.



  • Razones fuertes hacen acciones fuertes.



  • Duda que sean fuego las estrellas, duda que el sol se mueva, duda que la verdad sea mentira, pero no dudes jamás de que te amo.



  • Penséis lo que penséis, creo que no están de más las buenas palabras.



  • Quien se eleva demasiado cerca del sol con alas de oro las funde.



  • Vale más morir de inanición que implorar una recompensa que se tiene ya merecida.



  • Ten más de lo que muestras; habla menos de lo que sabes.



  • No ensucies la fuente donde has apagado tu sed.



  • ¡Qué lejos llegan los rayos de esa pequeña vela! Así brilla una buena acción en un mundo malo.



  • Las valiosas presas convierten en ladrones a los hombres honrados.



  • Romeo: Se ríe de las cicatrices quien nunca ha sentido una herida...



  • Las sensaciones extremas, cuando se prolongan, acaban por no sentirse.



  • La ira es un veneno que uno toma esperando que muera el otro.



  • Dueños de sus destinos son los hombres. La culpa, querido Bruto, no está en las estrellas, sino en nuestros vicios.



  • Nuestros cuerpos son nuestros jardines; nuestras decisiones, nuestros jardineros.



  • Podría estar encerrado en una cáscara de nuez y sentirme rey de un espacio infinito.



  • Mendigo como soy, también soy pobre en agradecimiento.