Skip to main content

Frases de Morgan Freeman

Frases de Morgan Freeman

Es un actor y director estadounidense.

50


  • Más allá de la noche que me cubre, negra como el abismo insondable, doy gracias a los dioses que pudieran existir por mi alma invicta.



  • Cuando era niño vi una vez un coche, pero ahora están por todas partes. Este maldito mundo va demasiado deprisa.



  • Supongo que cantaban sobre algo tan hermoso que no podía expresarse con palabras y que precisamente por eso te hacía palpitar el corazón.



  • En las azarosas garras de las circunstancias, nunca me he lamentado ni he pestañeado.



  • No tengo ni la más remota idea de qué coño cantaban aquellas dos italianas y lo cierto es que no quiero saberlo, las cosas buenas no hace falta entenderlas.



  • Como hombre, ¿cada cuándo te fijas en los zapatos de otro hombre?



  • Empeñarse en vivir o empeñarse en morir, es la pura verdad.



  • Sometido a los golpes del destino, mi cabeza está ensangrentada, pero erguida. Más allá de este lugar de cólera y lágrimas.



  • Pienso en cómo era yo entonces, un chico joven y estúpido que cometió un terrible crimen. Y quisiera hablar con él, me gustaría que entrara en razón, decirle cómo son las cosas, pero no puedo. El chico se fue hace años y este viejo es lo único que queda. He de vivir con eso.



  • ¿Besar a la chica más guapa del mundo? ¿Y cómo vas a conseguir eso?



  • La esperanza es algo bueno, quizás lo mejor de todo y las cosas buenas no mueren.



  • Yo no soy un niño, Sra. Daisy. Y tampoco soy una nuca que usted ve mientras viaja. Soy un hombre. Tengo casi 70 años. Y sé cuando tengo llena la vejiga.



  • Cuando te meten en la celda y te cierran los barrotes en las narices es cuando te das cuenta que es de verdad. En un abrir y cerrar de ojos toda tu vida se ha ido al carajo.



  • Estoy más interesado en la propuesta que en el premio, porque creo que la nominación sólo lo pone dentro de un grupo de actores destacados.



  • Créeme, estos muros embrujan, primero los odias, luego te acostumbras y al cabo de un tiempo llegas a depender de ellos. Eso es institucionalizarse.



  • Aquí dentro es un hombre importante, es un hombre culto, pero fuera de aquí no es nada.



  • El compuesto le permite abrir nuevas áreas de su cerebros. Tiene poderes.



  • Ustedes son ovejas entre lobos, sean prudentes como las serpientes, pero inocentes como las palomas.



  • Sí, tres botones es muy de los noventa.



  • Odio la palabra homofobia. No es una fobia. Usted no tiene miedo, usted es un imbécil.



  • Algunos dirán que lo hizo para ganarse el favor de los celadores o para ganarse amigos entre los presos yo creo que lo hizo para volver a sentirse normal aunque fuese sólo por un momento.



  • Eres curioso, ¿Qué buscas en esos libros?



  • ¿A quién no le gusta un buen truco?



  • Es difícil medir el valor de la vida de una persona. Para algunos se mide por los seres que deja atrás, para otros se mide por la fe, para otros por el amor, para otros la vida no tiene ningún significado. Para mí, yo creo que uno se mide por aquellos que se han medido por él.



  • Acérquense, porque cuanto más crean ver, más fácil será engañarles.



  • La esperanza puede volver loco a un hombre.



  • Las cosas buenas no hace falta entenderlas.



  • A veces la mejor manera de dar un puñetazo es retrocediendo.



  • Yo sé que cuando murió, tenía los ojos cerrados y el corazón abierto.



  • A la gente le encanta la violencia. Cuando ven un accidente reducen la velocidad para ver si hay muertos, son los que dicen ser amantes del boxeo. No tienen ni idea de lo que es. El boxeo es cuestión de respeto, de ganarte el tuyo y quitárselo al contrario.



  • Lo único que alguien necesita para ser especial es creer que puedes serlo. Sé que suena como un póster de gatos, pero es verdad.



  • Perdonar libera el alma. Remueve el miedo. Es por eso que es un arma tan poderosa.



  • Te mides a ti mismo por las personas que se miden a sí mismos por ti.



  • La gente quiere que haga todo por ellos, pero no se dan cuenta de que ellos tienen ese poder. ¿Quieres ver un milagro, hijo? Sé el milagro.



  • Creo que Dios, quien quiera que creas que sea, escucha todas las plegarias, incluso si a veces la respuesta es no.



  • Mi trabajo como actor consiste, sencillamente, en salir ahí y pronunciar las palabras que aparecen en el guión.



  • Para mí, no existe la menor diferencia entre interpretar al presidente de Estados Unidos o a un completo idiota.



  • Me levanto por la mañana. Desayuno tarde, no como demasiado. Con eso basta. Sigo teniendo energía suficiente para trabajar.



  • Creo que no me iría muy lejos. Solo unos 20 años atrás, un periodo estupendo de mi vida en que pasé mucho tiempo pilotando mi avión, navegando, montando mis caballos. Pude disfrutar de una vida muy cómoda y muy activa.



  • Cuando te conviertes en una estrella, ya no puedes transformarte para un personaje ni hacer los papeles más interesantes, que son los de un actor de carácter. Una estrella muy raramente tiene la oportunidad de hacer papeles como los de Quasimodo.