Frases de Marcel Proust

Seamos agradecidos con las personas que nos hacen felices, ellos son los encantadores jardineros que hacen florecer nuestra alma.
El gran talento procede, más que de los elementos intelectuales y de un refinamiento social superior al de los demás, de la facultad de transmitirlos, de invertirlos.
El verdadero viaje del aprendizaje consiste no en buscar nuevos paisajes sino en mirar con nuevos ojos.
Seamos agradecidos a la gente que nos hace feliz, son los jardineros encantadores que hacen florecer nuestras almas.
Seamos agradecidos con las personas que nos hacen felices; son los jardineros encantadores que hacen florecer nuestras almas.
Cada beso llama otro beso. ¡Con qué naturalidad nacen los besos en esos tiempo primeros del amor! Acuden apretándose unos contra otros; y tan difícil sería cortar los besos que se dan en una hora, como las flores de un campo en el mes de mayo.
A cierta edad, un poco por amor propio, otro poco por picardía, las cosas que más deseamos son las que fingimos no desear.
La mentira es esencial para la humanidad. Ellos son quizás tan importante como la búsqueda del placer y, además, son dictadas por esa búsqueda.
Las personas pueden tener diferentes tipos de placer. La verdad es que para los que van a renunciar a los otros.
No hay hombre, por sabio, que no tiene en algún momento de su juventud dicho cosas o vivido de una manera la conciencia de que es tan desagradable para él en la vida posterior que con mucho gusto, si le era posible, borrarlo de su memoria.
El verdadero viaje del descubrimiento no consiste en buscar nuevas tierras, sino en ver con nuevos ojos.
El verdadero viaje de descubrimiento no consiste en buscar nuevos paisajes, sino en tener nuevos ojos.