Frases de Lionel Messi

Algo en lo más profundo de mi persona me permite agarrar el éxito y seguir adelante tratando de ganar de nuevo.
En el fútbol como en la relojerÃa, el talento y la elegancia no significan nada sin rigor y precisión.
El dÃa en que parezca que no hay mejoras por hacer será un dÃa muy triste para cualquier jugador.
Siempre pensé que querÃa jugar profesionalmente, y siempre supe que para hacer eso tendrÃa que hacer muchos sacrificios.
Mi hijo salió muy competitivo. Pero a mà también me gusta ganar, asà que no le dejo (risas). Hasta cuando subimos alguna escalera y llega primero, se asegura de decirme que me ganó.
La espina que me queda en mi carrera es la selección, que jugamos varias finales y no ganamos ninguna, pero asà es el fútbol.
No puedes permitir que tu deseo de ser un ganador te afecte por alcanzar el éxito antes y creo que hay espacio para mejorar en cada deportista.
Como he dicho muchas veces antes, siempre estoy más propenso a recordar los objetivos de su importancia más que si son bellas o no. Goles marcados en la final, por ejemplo.
Al final, cuando se termine todo esto, ¿Qué te llevas? Mi intención es que, cuando me retire, se me recuerde por ser buen tipo.
HabÃa partidos en que no agarraba una, pero siempre estuve consciente de que yo era el crÃtico número uno conmigo mismo.
Cuando entré en el vestuario y vi a Henry, no me atrevÃa a mirarle a la cara. SabÃa todo lo que habÃa hecho en Inglaterra.
Con los árbitros y los rivales hablo más. Con los compañeros no es preciso. Hace tanto que jugamos juntos que nos entendemos con una mirada.
Cuando era niño, mis amigos me llamaban para salir con ellos, pero me gustaba quedarme en casa porque tenÃa entrenamiento al dÃa siguiente.
He hecho sacrificios al dejar Argentina, dejando a mi familia para empezar una nueva vida. He cambiado mis amigos, mi gente. Todo. Pero todo lo que hice, lo hice por el fútbol, para lograr mi sueño.
Finales como la Copa del Mundo o la Copa del Rey, son las que se han quedado conmigo durante más tiempo o que recuerdo más.
Barcelona es mi casa, porque tanto el club como la gente de aquà me lo han dado todo, pero no voy a dejar de ser argentino.
Es bueno que te valoren como persona, que tengan un buen concepto de ti más allá de meter muchos goles.
Nunca pienso en la jugada o visualizo cualquier cosa. Hago lo que se me viene en el momento. Instinto. Siempre ha sido de esta manera.
Poco a poco me estoy convirtiendo en algo mejor todo el tiempo. No he perdido la pasión para jugar.
Siendo famoso me da la oportunidad de ayudar a otras personas que realmente lo necesitan, especialmente los niños.
No necesito el mejor cabello o el mejor cuerpo. Solo denme un balón de fútbol y te mostraré lo que puedo hacer.
Mi familia siempre ha estado presente cuando más los necesito y a veces sienten más emociones que yo mismo.
Siempre que comienzo un año, empiezo con el objetivo tratando de lograr todo sin comparar lo que he logrado en otras temporadas.
Era lindo tener a Cristiano Ronaldo en La Liga por el prestigio que le daba. Excluyendo a él y a mÃ, los mejores jugadores del mundo son Mbappé, Neymar, Hazard, Suárez y el Kun.
Siempre cuesta digerir las derrotas y los malos resultados, pero mi hijo Thiago me obliga a comentar lo sucedido en el partido y explicar por qué no se ganó.
Desde los 13 años estoy en Barcelona, en el mejor equipo del mundo, en una de las mejores ciudades del mundo, mis hijos nacidos en Catalunya y no tengo necesidad de irme a ningún lado.
Hoy en dÃa cambió todo y los jóvenes ya no son tan tÃmidos y entran ligeros. Entran de otra manera.
A Cristiano Ronaldo se le echarÃa de menos en cualquier equipo en el que hubiera estado y se marchase.
En un penalti tienes mucho más que perder que ganar. Aquà el portero se siente más cómodo. Si le meten el gol es normal, es un penalti. El que chuta está más obligado a meter que el portero a parar.
Hay veces que notas que las cosas buenas de tu paÃs son las que más te alegran y, las malas, las que más te duelen.
Después de decir que dejaba la selección, lo pensé en frÃo y se estaba dando un mensaje erróneo a la gente que pelea por sus sueños.
Cuando hablo puede repercutir en todos lados, se puede interpretar de muchÃsimas maneras. Por eso intento tener cuidado y no meterme en lÃos.
Soy competitivo y me siento mal cuando perdemos. Lo puedes ver en mà cuando hemos perdido. Estoy enfadado. No me gusta hablar con nadie.