Frases de León Trotski

El fin podría justificar los medios mientras haya algo que justifique el fin.

Quien se arrodilla ante el hecho consumado es incapaz de enfrentar el porvenir.

Aquellos que no sean capaces de defender antiguas posiciones, nunca lograrán conquistar las nuevas.

Cuando uno corre con los lobos, uno debe de aullar con la manada.

Ante la pasividad del partido, las esperanzas de las masas ceden el puesto a la desilusión, y entretanto, se repone de su pánico el enemigo, y de esta desilusión saca ventaja.

Las masas revolucionarias en alza nunca perdonan la cobardía y la traición.

No hay reglas absolutas de conducta, ya sea en la paz o la guerra. Todo depende de las circunstancias.

El ascenso histórico de la humanidad, en su conjunto, se puede resumir como una sucesión de victorias de conciencia sobre las fuerzas ciegas - en la naturaleza, en la sociedad, en el hombre mismo.

Usted puede no estar interesado en la estrategia, pero la estrategia está interesada en ti.

Donde la fuerza es necesaria, se debe hacer uso de ella con audacia, resolución y hasta el final. Pero conviene conocer las limitaciones de la fuerza; saber dónde combinar la fuerza con la maniobra, la conciliación con la conciliación.

La vida no es un asunto fácil … No puedes vivirla sin caer en la frustración y el cinismo a menos que tengas ante ti una gran idea que te eleve por encima de la miseria personal, por encima de la debilidad, por encima de toda clase de perfidia y bajeza.

La profundidad y fuerza del carácter humano es definido por sus reservas morales. La gente se revela a sí misma completamente sólo cuando es lanzada fuera de las condiciones a la que están acostumbradas en sus vidas, pues sólo entonces tienen que recurrir totalmente a sus reservas.

De todas las cosas que le pasan a las personas, la vejez es la más inesperada.