Frases de John Dewey

Nosotros recordamos, naturalmente, lo que nos interesa y porque nos interesa.

Encontrar a lo que te ajustas y asegurarte una oportunidad para hacerlo, es la llave de la felicidad.

Aprender no es prepararse para la vida. Aprender es la vida misma.

Encontrar lo que uno esta destinado a hacer, y asegurarse una oportunidad para hacerlo, es la llave de la felicidad.

La educación no es la preparación para la vida; es la vida misma.

La educación no es la preparación para la vida; es la vida misma.

La naturaleza de la experiencia está determinada por las condiciones esenciales de la vida.

El tiempo y la memoria son verdaderos artistas; remodelan la realidad más cerca del deseo del corazón.

Lo que ocurre en el pasado vuelve a ser vivido en la memoria.

La unidad de todas las ciencias se encuentra en la geografía. La importancia de la geografía es que presenta la Tierra, como la sede permanente de las ocupaciones del hombre.

Suerte, malo si no es bueno, siempre estará con nosotros. Pero tiene una forma de favorecer a los inteligentes y mostrando la espalda a los estúpidos.

El fracaso es instructivo. La persona que realmente piensa aprende tanto de sus fracasos como de sus éxitos.

Solo pensamos cuando nos confrontamos con un problema.

Encontrar lo que uno quiere hacer y asegurar una oportunidad para hacerlo, es la clave de la felicidad.

El equilibrio no se adquiere mecánicamente y de un modo inerte, sino a partir de la tensión ya causa de ella.

Hay más que un vínculo verbal entre las palabras común, comunidad y comunicación … Prueba el experimento de comunicar, con plenitud y precisión, una experiencia a otra, sobre todo si es algo complicado, y encontrarás tu propia actitud. hacia el cambio de tu experiencia.

Llegar a una meta es el comienzo de otra.

La confianza es franqueza y coraje para enfrentar los hechos de la vida.

Las sensaciones no son parte de ningún conocimiento, bueno o malo, superior o inferior. Son, más bien, provocaciones incitantes, ocasiones para un acto de indagación que ha de terminar en conocimiento.

La razón y la ley son sinónimos.

La democracia tiene que nacer de nuevo cada generación, y la educación es su comadrona.

El conocimiento no es algo separado y que se baste a sí mismo, sino que está envuelto en el proceso por el cual la vida se sostiene y se desenvuelve.

Para mí la fe es no preocuparse.

La función intelectual de las dificultades es la de conducir a hombres y mujeres a pensar.