Frases de Henri-Frédéric Amiel

Fue un filósofo, moralista y escritor suizo, autor de un célebre Diario íntimo.

Nada muestra mejor el carácter de cada cual, que su manera de portarse con los necios.
El deber es ser útil, no como se desee, sino como se pueda.
¡Qué difícil es vivir, oh fatigado corazón mío!
La vida es un aprendizaje de renunciamiento progresivo, de continua limitación de nuestras pretensiones, de nuestras esperanzas, de nuestra fuerza, de nuestra libertad.
Es peligroso abandonarse a una excesiva aflicción; ésta suprime totalmente el valor en nosotros y aun todo deseo de remedio.
Es peligroso dejarse llevar del placer de las lágrimas; por él se pierde el ánimo y aun la voluntad del remedio.
Hay una moral femenina y una moral masculina como capítulos preparatorios de una moral humana.
Nada importa el futuro cuando uno está en paz con su conciencia y tiene su espíritu reconciliado y en orden. Sé lo que debes; lo restante, sólo a Dios atañe.