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Frases de Equilibrio

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  • Podemos estar seguros de que la gran esperanza de mantener el equilibrio en toda situación reside en nuestro interior.




  • Cuando estás desesperado y al borde del abismo, o te precipitas al vacío o se dan circunstancias excepcionales que te hacen recobrar el estado de equilibrio perdido.




  • El equilibrio entre vida y trabajo es sin duda una de las luchas más significativas encaradas por el hombre moderno.




  • Vivir es como caminar por la cuerda floja, sólo unos pocos mantienen el equilibrio.




  • Tiempo para todo: para relajarse y para estar ocupado, para divertirse y para trabajar, para recibir y para dar, para comenzar y para terminar.




  • Siempre se ha creído que existe algo que se llama destino, pero siempre se ha creído también que hay otra cosa que se llama albedrío. Lo que califica al hombre es el equilibrio de esa contradicción.




  • Para conservar el equilibrio, debemos mantener unido lo interior y lo exterior, lo visible y lo invisible, lo conocido y lo desconocido, lo temporal y lo eterno, lo antiguo y lo nuevo.




  • Un ser humano en perfección debe siempre preservar una mente tranquila y pacífica y nunca permitir que la pasión o un deseo transitorio perturben su tranquilidad.




  • No hay secreto para el equilibrio. Solo tienes que sentir las olas.




  • La vida surge de la muerte, la muerte surge de la vida; al ser opuestas se anhelan la una a la otra, se dan a luz la una a la otra y renacen para siempre. Y con ellas, todo renace, la flor del manzano, la luz de las estrellas. En la vida está la muerte. En la muerte es el renacimiento. ¿Qué es entonces la vida sin muerte? ¿Vida inmutable, eterna, eterna? ¿Qué es sino muerte sin renacer?




  • Hay que buscar el buen equilibrio en el movimiento y no en la quietud.




  • Sé que mi nacimiento es una casualidad, un accidente risible, y no obstante, apenas me descuido me comporto como si se tratara de un acontecimiento capital, indispensable para la marcha y el equilibrio del mundo.




  • Hay algo perfecto en el imperfecto: la ley mantiene el equilibrio a través de la yuxtaposición de la belleza, que gana la perfección a través de la imperfección.




  • La virtud de cada ser humano, es saber mantener el equilibrio ante sus victorias y no caerse ante sus derrotas.




  • La vida es un sistema equilibrado de aprendizaje y evolución. De placer y dolor. Cada situación en nuestra vida sirve a un propósito. Depende de nosotros reconocer lo que podría ser ese propósito.




  • Sin equilibrio, una vida ya no vale la pena el esfuerzo.




  • No hay decisión que se pueda tomar que no venga con algún tipo de equilibrio o sacrificio.




  • Cuando se deja de frecuentar a los verdaderos amigos, se pierde el equilibrio.




  • No hay tal cosa como el equilibrio entre trabajo y vida. Todo lo que vale la pena luchar por desequilibrar tu vida.




  • Cuando la normalidad es el factor que produce equilibrio, hay serenidad y bienestar en la vida. Debemos ser selectivos y prudentes con los cambios, ya que, aunque podrían traernos mejoras, siempre introducen elementos de incertidumbre, ansiedad y riesgo.




  • Uno de mis nietos me dijo el otro día que le gustaba cómo me parecía a uno de sus juguetes, una peonza. No lo había pensado. Siempre me estoy moviendo, es cierto. Yo intento mantener un equilibrio, y sospecho que nunca lo logro.




  • Cuando el trago hace cosquillas, afloja lengua y rodillas.




  • Andar derecho y mucho beber, no puede ser.




  • Mucho beber y andar derecho, no es hecho.




  • El equilibrio se logra cuando las cosas las haces en el momento preciso. En ese instante, los excesos no existen, los impulsos del externo desaparecen y por tanto no se actúa con el sentir humano sino con el sentir del espíritu... El equilibrio lo logras siendo tu mismo.




  • Hemos de encontrar un equilibrio entre lo que debemos hacer, lo que queremos conseguir y lo que nos gustaría realizar.




  • La naturaleza siempre encuentra la forma de equilibrarse otra vez.




  • El equilibrio es no dejar que nadie te quiera menos de lo que te quieres tú.




  • Es importante saber dónde estás en cada momento. Justo aquí está el equilibrio perfecto. El encuentro de cielo y tierra. No demasiado Dios, no demasiado egoísta, de otra forma la vida se vuelve una locura. Si pierdes equilibrio, pierdes poder.




  • Los humanos necesitamos estabilidad. Pero demasiada estabilidad puede significar que hemos renunciado a utilizar nuestras capacidades, nuestra creatividad, que nos encerramos en un papel y en un guión que aprendimos en la infancia y que tal vez no nos hace felices. No seas un esclavo sin saberlo. Cuestiona cómo vives, lo que eres y cómo te relacionas con el resto del mundo. Escribe tu propio guión y reinvéntate.




  • Mantenerse en sintonía con cada molécula del universo requiere mucha concentración.




  • Un guerrero equilibra soledad y dependencia.




  • La impaciencia entorpece el pensamiento y lo transforma en impulso. La paciencia es inteligencia, por lo tanto es equilibrio y armonía del espíritu.




  • Todo lo que ves coexiste en un delicado equilibrio.




  • Una cosa es evidente: si, por un lado, las actitudes extremistas provocan entusiasmo, arrastran a los otros, son índices de vigor, por otro, las actitudes equilibradas son por lo general incómodas, a veces desagradables y casi nunca parecen heroicas. Por lo general, se precisa bastante valor (una clase muy especial de valor) para mantenerse en equilibrio, pero no se puede evitar que a los demás les parezca una demostración de cobardía. El equilibrio es aburrido, además. Y el aburrimiento es, hoy en día, una gran desventaja.




  • Escúchame, has extendido alguna vez los brazos y dado vueltas... se te acelera el corazón, el mundo se vuelve del revés, pero si no tienes cuidado y fijas la mirada en algo, puedes caer.




  • Para hallar el equilibrio que buscas debes tener los pies tan firmemente plantados en la tierra que parezca que tienes cuatro piernas en lugar de dos. De este modo podrás estar en el mundo. Pero debes dejar de mirar el mundo con la mente. Tienes que mirarlo con el corazón. Así llegarás a conocer a Dios.




  • Por sus pasadas o futuras virtudes, todo hombre es acreedor a toda bondad, pero también a toda traición, por sus infamias del pasado o del porvenir. Así como en los juegos de azar las cifras pares y las cifras impares tienden al equilibrio, así también se anulan y se corrigen el ingenio y la estolidez.




  • Hemos de potenciar el equilibrio, la madurez, el autocontrol y desterrar la tiranía, la manipulación, la insolidaridad, el narcisismo, el desequilibrio y la insatisfacción permanente. Porque debemos saber disfrutar de nuestra vida, de esa búsqueda sana y transparente de la felicidad.




  • En mi vida personal, el amor es lo que me mantiene en equilibrio. Y, si yo no fuera feliz no podría transmitir lo que creo es la esencia de mi trabajo. El saber que todo esta en orden me permite seguir adelante.