Skip to main content

Frases de Amor Cristianas

Frases de amor cristianas. El amor siempre es algo muy positivo, pero el enfoque cristiano del amor es algo para compartir.

389


  • Rezar por ti a Dios en la oscuridad de mi habitación, es una de mis maneras de demostrarte amor.




  • Cuando alabas al Señor con tanta fe que no te cabe en el pecho comprendes que un amor tan hermoso como el nuestro solo pudo ser de su creación.




  • Me rompieron el corazón y dejé de creer en el amor. Puse mi corazón en manos de Dios y Él en su infinita sabiduría, lo colocó en tus manos.




  • El haberte encontrado en mi camino fue el mejor regalo que Dios pudo haber enviado a mi vida.




  • Necesito alabar a Dios y amarte, por eso a ambos escribo este mensaje: Con Él como guía, espero unir tu vida con la mía.




  • Frases y mensajes de amor existen muchos, pero no encontré ninguno que dé gracias a Dios por el amor que compartimos.




  • El Señor nos escucha y obra para nosotros, y si alguien necesita pruebas, no tengo más que presentarte, porque tú eres la luz que ha enviado a iluminar mi camino.




  • Dios nos ha unido y nada ni nadie, solo Él, podrá separarnos alguna vez.




  • Eres el milagro que envió Dios a mi vida para convencerme de su existencia. Ahora estoy en deuda con Él, y por ello siempre seré, su servidor fiel.




  • Dios ama a cada uno de nosotros, como si sólo hubiera uno de nosotros.




  • Sabrás que tienes a la persona perfecta para ti a tu lado cuando esa persona te acerque más a Dios.




  • Lo maravilloso no es que haya obstáculos en este mundo, es poder sortearlos para encontrar a Dios y al amor.




  • Solo con Dios en el corazón podemos amar por siempre a una persona y conservarla a nuestro lado.




  • Si tengo el don de profecía, y entiendo todos los designios secretos de Dios, y sé todas las cosas, y tengo la fe necesaria para mover montañas, pero no tengo amor, no soy nada




  • Si alguien ofreciera todas sus riquezas a cambio del amor, burlas tan solo recibiría




  • El agua de todos los mares no podría apagar el amor; tampoco la de todos los ríos podrían extinguirlo. Así pasa con el nuestro, solo Dios podría separar lo que Él unió.




  • Somos muy afortunados si recordamos que Dios dijo que el amor jamás dejará de existir.




  • El verdadero amor solo se interpone en tu camino cuando vas contrario al camino de Dios.




  • Todo lugar que compartimos con Dios y con nuestro ser amado constituye el mundo para nosotros.




  • El amor más fuerte es aquel que se basa en el amor a Dios por encima del de tu pareja.




  • A quién Dios ha unido, ningún hombre podrá separar.




  • Dios bendiga este matrimonio.




  • Somos el uno para el otro, ambos para Dios.




  • Los dos se funden en un solo ser.




  • No busques a una pareja para ser feliz. Sé feliz primero tú, para que luego puedas hacer feliz a esa persona que Dios pondrá en tu camino.




  • Me encanta que ames a Dios más de lo que me amas a mí.




  • La historia de nuestro amor es el guion que Dios escribe día a día en nuestras vidas.




  • Pídele a Cristo descubrir la belleza que no se ve con los ojos, pero que realmente enamora. Busca eso en tu matrimonio y amarás por siempre.




  • La persona correcta y pareja ideal para tu vida es aquella que te acerca mucho más a Dios.




  • Dios amó al mundo y dio a su Hijo, lo que significa que el amor implica sacrificios y te amo con todo mi ser y vale la pena.




  • Tú eres amable, cuidadoso y misericordioso, lo cual te calza para amar a Dios y valorar sus principios. Eres una mujer increíble y no puedo imaginarme la vida sin ti.




  • Te amo con tus defectos e imperfecciones porque Cristo nos enseñó el significado del verdadero amor cuando murió por nosotros cuando todavía éramos pecadores.




  • Yo moriría de buena gana por ti si fuera necesario, así como Cristo murió por el mundo. Significa que te amo desinteresadamente y de todo corazón.




  • El amor perfecto echa fuera el miedo, te amo con todo mi ser, así como Cristo amó al mundo.




  • Eres única e irremplazable, la propia obra maestra de Dios. Llenas mi corazón con la alegría y el gozo que siempre está presente.




  • Irradias bondad y amabilidad, una criatura maravillosa creada por el Creador y un deleite para la vista y el corazón.




  • Preciosa mía, gracias por darlo todo, así como Cristo lo dio todo por nosotros. Eres maravillosa y deliciosa.




  • Te veo, de la manera en que Dios quiso que te viera, a su propia imagen y semejanza. Eres una criatura exquisita y un ser de amor.




  • Sé que conozco a Dios porque soy capaz de amar de todo corazón como lo hago. Gracias por enseñarme el significado del verdadero amor.




  • Querida mía, mi amor por ti no conoce límites, sólo el amor de Dios no conoce límites.