Extraño ser una niña. Las rodillas raspadas eran más fáciles de sanar.
Extraño ser una niña. Las rodillas raspadas eran más fáciles de sanar que un corazón roto...
Interpretacion
La frase contrasta la sencillez de las heridas físicas en la infancia con la complejidad del dolor emocional en la adultez. Evoca nostalgia por tiempos en que el sufrimiento era más tangible y reparable. Sugiere que las heridas del corazón dejan cicatrices más profundas y duraderas. Refleja una reflexión sobre pérdida de inocencia y vulnerabilidad.
Temas
nostalgia niñez dolor corazón roto vulnerabilidad heridas reflexión
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