A veces nos ciega la arrogancia y no som
A veces nos ciega la arrogancia y no somos conscientes de lo elementales que son las cosas. Hasta que alguien nos pone delante de los ojos la simplicidad desnuda de la realidad.
Te pueden interesar también
A veces nos ciega la arrogancia y no somos conscientes de lo elementales que son las cosas. Hasta que alguien nos pone delante de los ojos la simplicidad desnuda de la realidad.