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Frases de Isabel Allende

Frases de Isabel Allende

Es una escritora chilena con nacionalidad estadounidense, de ascendencia hispano-portuguesa y nacida en Perú.

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  • Cualquiera con fanatismo, poder e impunidad puede transformarse en una bestia.



  • El mundo se dividía en abejasreinas destinadas al placer y en obreras cuya misión era mantener a las primeras.



  • El primer paso para sanar consistía en desprenderse de la energía negativa y el resentimiento; necesitaba una historia positiva que la conectara con la totalidad del universo y la luz divina.



  • Cuando uno se gana el sustento en lo que no le gusta se siente como un esclavo, cuando uno lo hace en lo que ama se siente como un príncipe.



  • Los conquistadores carecen de vergüenza: llegan como mendigos, se comportan como ladrones y se creen señores.



  • Cada cual tiene su karma, no es posible dirigir las vidas ajenas, sólo enmendar a veces el rumbo de la propia;



  • Un hombre hace lo que puede, una mujer hace lo que el hombre no puede.



  • La vida está llena de ironías, mejor gozar lo que se tiene ahora, sin pensar en un mañana hipotético.



  • Escribir es para mí como hacer ganchillo: siempre temo que se me vaya a escapar un punto.



  • Escribir una novela es como bordar una tapicería con hilos de muchos colores: es un trabajo artesanal de cuidado y disciplina.



  • Prométeme que siempre te vas a querer a ti misma como te quiero yo.



  • La escritura es una larga introspección, es un viaje hacia las cavernas más oscuras de la conciencia, una lenta meditación.



  • El destino se puede cambiar, pero para limpiar el karma se requiere toda una vida, y tal vez eso no alcance.



  • De la quietud nace la inspiración y del movimiento surge la creatividad.



  • Todos tenemos adentro una insospechada reserva de fortaleza que emerge cuando la vida nos pone a prueba.



  • Hay mucha gente buena, pero es discreta. Los malos, en cambio, hacen mucho ruido, por eso se notan más.



  • Se dieron cuenta de que los espíritus no provocan enfermedades, desgracias o muerte, como habían oído; el sufrimiento es causado por la maldad y la ignorancia de los vivos.