Frases de Ernesto Sábato - Todos somos nada, porque la nada siempre
La vanidad es tan fantástica, que hasta nos induce a preocuparnos de lo que pensarán de nosotros una vez muertos y enterrados.
La vida es tan corta y el oficio de vivir tan difícil, que cuando uno empieza a aprenderlo, ya hay que morirse.
Esta “incapacidad” es justamente la raíz de su ilimitada riqueza, lo que diferencia a un gran arte de un simple arte mimético.
Es común que en las noches de insomnio sea teóricamente más decidido que durante el día, en los hechos.
¿Por qué no suponer, al revés, que esa continua farsa es autenticidad? Cualquier expresión es, en definitiva, un género de sinceridad.