No juzguéis, para que no seáis juzgados. — Jesucristo
No juzguéis a los demás si no queréis ser juzgados. Porque con el mismo juicio que juzgareis habéis de ser juzgados, y con la misma medida que midiereis, seréis medidos vosotros.
Interpretacion
La frase advierte contra la hipocresía y promueve la reciprocidad moral: si juzgas a los demás, serás juzgado de la misma manera. Invita a la humildad y a medir a otros con la misma justicia con que deseamos ser medidos. Es una llamada a la empatía y al trato equitativo. Apunta a una ética de responsabilidad personal en el juicio.
Temas
no juzgar juicio compasión empatía respeto ética jesucristo
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