Frases de Charles Spurgeon - Nadie es tan miserable como el pobre que

El amor nunca pregunta qué beneficio obtendrá del amor. El amor por su propia naturaleza es una cosa desinteresada. Ama por el bien de la criatura que ama, y ​​nada más.

La sinceridad hace que la persona menos pensada se vuelva más valiosa que el más talentoso hipócrita.

La ansiedad no libera el mañana de sus penas, solo vacía el presente de su fortaleza.

. «Si alguno de ustedes me preguntara por un epítome del cristianismo, yo le diría que eso se encuentra en una palabra: oración. Vive y muere sin orar, y tendrás que orar bastante cuando llegues al infierno.

E iré tan lejos como Martín Lutero, en esa fuerte afirmación suya, donde dice: «Si alguno atribuye alguna salvación, incluso la más mínima, al libre albedrío del hombre, no sabe nada de la gracia, y no ha aprendido a Jesucristo correctamente».