La avaricia genera envidia, un gusano siempre royendo — Santa Catalina de Siena
La avaricia genera envidia, un gusano que siempre está royendo, permitiendo que los avaros no disfruten ni del bien propio ni del de los demás.
Interpretacion
La frase denuncia cómo la avaricia alimenta la envidia, una emoción destructiva y persistente. Esa envidia consume a quien la siente, impidiéndole disfrutar tanto de sus propios bienes como de los ajenos. Es una advertencia moral sobre el daño interno que causa el afán de acumular.
Temas
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