Hoy, como en la Edad Dorada, vivimos en
Hoy, como en la Edad Dorada, vivimos en un mundo en el que la moral de la responsabilidad personal se codea con una cultura de la codicia y de la irresponsabilidad social flagrante. Ahora, como entonces, las empresas se han desprendido de su responsabilidad colectiva respecto a los empleados, al igual que el gobierno lo ha hecho respecto a sus ciudadanos.
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