Las gentes del Mediterráneo empezaron a emerger del barbarismo cuando aprendieron a cultivar el olivo y la vid.
Entre hombre y hombre no hay gran diferencia. La superioridad consiste en aprovechar las lecciones de la experiencia.
Recordad que el secreto de la felicidad está en la libertad, y el secreto de la libertad, en el coraje.
La fortaleza de un ejército estriba en la disciplina rigurosa y en la obediencia inflexible a sus oficiales.
No es el debate el que impide la acción, sino el hecho de no ser instruido por el debate antes de que llegue la hora de la acción.
La guerra consiste no solamente en las armas, sino también en el dinero, por medio del cual las armas pueden ser útiles y muy provechosas.