Frases de Paulo Coelho

Paulo Coelho es un escritor brasileño. Su obra El Alquimista es el libro brasileño más vendido de todos los tiempos.

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Aprendí que esperar es lo más difícil, y quiero acostumbrarme al sentimiento, sabiendo que estás conmigo, incluso cuando no estás a mi lado.
Nunca podemos juzgar la vida de los demás porque cada persona solo conoce su propio dolor. Una cosa es sentir que estás en el camino correcto, pero otra es pensar que el tuyo es el único camino.
La gente se queja mucho, pero se acobardan a la hora de actuar. Quieren que todo cambie, pero se niegan a cambiar.
La gloria del mundo es transitoria, y no es ella la que nos da la dimensión de nuestra vida, sino la elección que hacemos de seguir nuestra leyenda personal, tener fe en nuestras utopías y luchar por nuestros sueños.
Cuánto más se aproxima uno al sueño, más se va convirtiendo la leyenda personal en la verdadera razón de vivir.
Debemos escuchar al niño que fuimos un día y que existe dentro de nosotros. Ese niño entiende de instantes mágicos.
Dile a tu corazón que el miedo al sufrimiento es peor que el sufrimiento mismo. Y ningún corazón ha sufrido cuando va en busca de su sueño.
Tenemos que olvidar lo que queremos ser, para poder ser lo que realmente somos.
Siempre que quieras lograr algo, mantén los ojos abiertos, concéntrate y asegúrate de saber exactamente qué es lo que quieres. Nadie puede alcanzar su objetivo con los ojos cerrados.
Para mí, una bruja es una mujer que es capaz de dejar que su intuición tome control de sus acciones, que se comunica con su entorno, que no tiene miedo de enfrentar los desafíos.
La razón teme la derrota, pero la intuición disfruta la vida y sus desafíos.
La melancolía se ha convertido en apatía.
Quien ama esperando una recompensa está perdiendo el tiempo.
Cuando eres entusiasta sobre lo que haces, sientes energía positiva.
El dolor está en nuestra vida cotidiana, en el sufrimiento escondido, en la renuncia que hacemos y culpamos al amor por la derrota de nuestros sueños.
Cuando no tenía nada que perder, lo tenía todo. Cuando dejé de ser quien soy, me encontré a mi mismo.
Cuando alguien desea algo debe saber que corre riesgos y por eso la vida vale la pena.
La vida no está hecha de deseos y sí de los actos de cada uno.
Justo en el momento en el que todo está saliendo bien y tienes tu sueño casi al alcance de la mano, hay que estar más atento que nunca. Porque, cuando casi lo hayas conseguido, vas a tener un enorme sentimiento de culpa.
Al ir en busca de la justicia voy a tener que alejar el mal sin exasperación ni impaciencia.
Al principio solo había una pequeña cantidad de injusticia en el mundo, pero todos los que vinieron después agregaron su porción, siempre pensando que era muy pequeño y sin importancia, y mira dónde hemos terminado hoy.
El fanatismo es la única forma de poner fin a las dudas que constantemente perturban el alma humana.
Decir la verdad y hacer llorar a alguien es mejor que mentir y hacer sonreír a alguien.
Si aparece alguien sólo para provocarte, limpia el polvo de tus zapatos y sigue adelante.
Afronta tu camino con coraje, no tengas miedo de las críticas de los demás. Y, sobre todo, no te dejes paralizar por tus propias críticas.
No hay nada peor que sentir que a nadie le importa el hecho de que existamos o no.
No tenía miedo a las dificultades: lo que la asustaba era la obligación de tener que escoger un camino. Escoger un camino significaba abandonar otros.
Sólo una cosa vuelve un sueño imposible: el miedo a fracasar.
Todos los días Dios nos da un momento en que es posible cambiar todo lo que nos hace infelices. El instante mágico es el momento en que un sí o un no pueden cambiar toda nuestra existencia.
Cuando Dios quiere enloquecer a alguien, satisface todos sus deseos.
Cualquiera que ama con la expectativa de ser amado de vuelta, está perdiendo su tiempo.
No dejes que la duda te paralice, toma las decisiones que tienes que tomar, incluso si no estás seguro de que es la decisión correcta.
El diablo habita en los detalles. Recuerda ese proverbio y podrás transformar las decisiones incorrectas en correctas.
Te amo porque el universo completo conspiró para ayudarme a encontrarte.
Cuando amamos, buscamos por ser mejores. Y cuando buscamos ser mejores, todo a nuestro alrededor se vuelve mejor también.
Cuando cada día es igual al siguiente, es porque la gente no reconoce las cosas buenas que suceden en sus vidas cada día que el sol sale.
Cuando quieres algo, todo el universo conspira para ayudarte a lograrlo.
Ninguno de nosotros sabe lo que pasará el siguiente minuto, y aun así, seguimos. Seguimos porque confiamos, porque tenemos fe.
Enseñar es solo demostrar qué es posible. Aprender es hacerlo posible para ti.
Si quieres ser fiel a alguien o algo, empieza por serte fiel a ti mismo.