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Frases de Opresión

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  • Ni los muertos pueden descansar en paz en un país oprimido.




  • No existe tiranía peor que la ejercida a la sombra de las leyes y con apariencias de justicia.




  • No habéis convencido a un hombre por el hecho de haberlo reducido al silencio.




  • No hay nada tan dulce como la diversidad; el cambio de cadenas suple a la libertad.




  • No hay servidumbre más vergonzosa que la voluntaria.




  • Parecemos tan libres y ¡estamos tan encadenados! (PaMás fácil es recomendar «ten paciencia» que tenerla.




  • Que siempre la privación fue causa del apetito.




  • Quien al vulgo le exige deberes sin avenirse a concederle derechos, lo habrá de pagar caro.




  • Quizá el mayor consuelo de los oprimidos sea el creerse superiores a sus tiranos.




  • Todo acto forzoso se vuelve desagradable.




  • Todo aquello que sofoca la individualidad, sea cual sea el nombre que se le dé, es despotismo.




  • Todo hombre debe ser soldado cuando se trate de combatir la tiranía.




  • Un pueblo que pierde la fuerza necesaria para sacudirse el yugo acaba por venerarlo.




  • No habrá paz en la tierra mientras perduren las opresiones de los pueblos, las injusticias y los desequilibrios económicos que todavía existen.




  • Un pueblo que oprime a otro pueblo no puede ser libre.




  • Mis únicos objetivos son y serán siempre promover la felicidad y la prosperidad de mi propio país excesivamente oprimido.




  • La humanidad empezará verdaderamente a merecer su nombre el día en que haya cesado la explotación del hombre por el hombre.




  • Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera.




  • La cuestión es entre la libertad y la tiranía. Nuestros opresores, no por su origen sino por el mero hecho de serlo, son el objeto de nuestro odio.




  • El único medio seguro de dominar una ciudad acostumbrada a vivirlibre es destruirla.




  • Porque la tortuga tiene los pies seguros, ¿es ésta una razón para cortar las alas al águila?




  • Un gobierno que usa la fuerza para mantener su dominio, enseña al oprimido a usar la fuerza para oponerse a él.




  • Los gobiernos que han pretendido sofocar la vozlibre de los pueblos, han muerto asfixiados apenas se ha hecho el silencio que apetecían.




  • Mi mayor honra es surgir del seno de los oprimidos, que son el alma y nervio de la raza.




  • Una autoridad que se funda en el terror, en la violencia, en la opresión, es al mismo tiempo una vergüenza y una injusticia.




  • Sin embargo, recuerda que, a veces, las personas a las que oprimes se hacen más poderosas de lo que te gustaría.




  • El humor es el arma de la gente desarmada: ayuda a las personas oprimidas a sonreír ante la situación que les duele.




  • Mal gobernante el que exprime al pueblo dándole poco a cambio.




  • Ningún país puede pensar en desarrollarse sobre bases coloniales.




  • Aquéllos que niegan la libertad a otros no la merecen para sí, y bajo un Dios justo no pueden conservarla mucho tiempo.




  • Venezuela nunca será colonia norteamericana ni de nadie.




  • No hay barbarie comparada a la del colonialismo. África nunca se recuperó.




  • Nunca, nunca y nunca otra vez, debería ocurrir que esta tierra hermosa experimente la opresión de una persona por otra.




  • Pueblo que se somete, perece.




  • Todos los opresores comprenden, tarde o temprano, que entre sus muchas víctimas habrá al menos una que algún día se alzará contra ellos y les plantará cara.




  • Dentro este sistema las mujeres son doblemente esclavas y para liberarse tienen que ser doblemente revolucionarias.




  • El gobierno, con sus leyes y regulaciones más numerosas que los pelos de un buey, es un vicioso opresor del individuo, más temible que el más fiero de los tigres.




  • Te llamas liberal y despreocupado, y el día que te apoderes del látigo azotarás como te han azotado.




  • Nuestra historia es la historia de las batallas y de las imposiciones. La vergüenza de la humanidad.




  • Un luchador por la libertad aprende, por el camino más duro, que es el opresor el que define la naturaleza de la lucha.