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Frases de Og Mandino

Frases de Og Mandino

Fue un escritor estadounidense y autor del best seller El vendedor más grande del mundo.

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  • Si persisto lo suficiente, ganaré.



  • Amaré la luz para que me muestra el camino, sin embargo, voy a soportar la oscuridad porque me muestra las estrellas.



  • El fracaso nunca me alcanzará si mi determinación de tener éxito es lo suficientemente fuerte.



  • Hazlo siempre lo mejor que puedas. Lo que siembras ahora, lo cosecharás más tarde.



  • Trabaja como si fueses a vivir para siempre y vive como si fueses a morir hoy.



  • Atesora el amor que recibas por encima de todo; sobrevivirá mucho después de que tu salud haya desaparecido



  • El fracaso nunca me supera si mi determinación a triunfar es lo suficientemente fuerte.



  • Da siempre lo mejor que tienes. Lo que plantes ahora, lo cosecharás más tarde.



  • Hay una inconmensurable distancia entre tarde y demasiado tarde.



  • Hay una inconmensurable distancia entre ‘medio tarde’ y ‘demasiado tarde’.



  • La gente siempre responde positivamente a la alegría y al entusiasmo.



  • No te sientas avergonzado de intentarlo y fallar, puesto que la persona que nunca ha fallado es alguien que nunca lo ha intentado.



  • Da siempre lo mejor de ti mismo. Lo que plantas ahora, lo cosecharás más tarde.



  • El fracaso nunca me detendrá si tengo la suficiente determinación en lograr algo.



  • Cada derrota, cada pérdida, contiene su propia semilla, su propia lección para mejorar el rendimiento en la próxima ocasión.



  • Los premios se encuentran al final de la competición y no al principio. La copa del vencedor se gana después de mucho cansarse, sudar y sufrir.



  • Desde hoy, trata a todos los que veas como si a media noche todos estuvieran muertos. Entrégales todo el cuidado, la amabilidad y la comprensión que puedas reunir, y hazlo sin pensar en ninguna recompensa.



  • Si soy lo suficientemente persistente, ganaré.



  • Jamás sientas ningún tipo de vergüenza por intentar y fracasar, porque el que nunca ha fallado, es aquel que nunca lo ha intentado.



  • El fracaso nunca me alcanzará si mi determinación para triunfar es lo suficientemente fuerte.



  • Ríase de sí mismo y de la vida. No con el espíritu de burla o de lloriqueo de autocompasión, sino como un remedio, una droga milagrosa, que aliviará su dolor, curará su depresión y le ayudará a poner en perspectiva esa aparentemente terrible derrota y preocúpate con la risa de tus apuros, liberando así tu mente para pensar con claridad en la solución que seguramente vendrá. Nunca te tomes demasiado en serio a ti mismo.



  • El entusiasmo pisotea los prejuicios y la oposición, rechaza la inacción, asalta la ciudadela de su objeto y, como una avalancha, abruma y engulle todos los obstáculos.



  • Presta menos atención a lo que oyes sobre alguien, y más a lo que aprendes sobre él… mientras haces el esfuerzo.



  • Cada día es un regalo especial de Dios, y aunque la vida no siempre sea justa, nunca debes permitir que los dolores, los obstáculos y las desventajas del momento envenenen tu actitud y tus planes para ti y tu futuro.



  • Si me siento insignificante, recordaré mis metas. Hoy, sin lugar a dudas, seré dueño de mis emociones.



  • Nunca sienta vergüenza por intentarlo y fracasar porque el que nunca ha fallado es el que nunca lo ha intentado.



  • Cada derrota, cada desamor, cada pérdida contiene una semilla, su propia lección de cómo mejorar tu rendimiento la próxima vez.



  • Sin entusiasmo, estás condenado a una vida de mediocridad, pero con él puedes lograr milagros.



  • Busco constantemente mejorar mis modales y gracias, porque son el azúcar al que todos se sienten atraídos.



  • Cuenta tus bendiciones. Una vez que te des cuenta de lo valioso que eres y lo mucho que tienes para ti, las sonrisas volverán, saldrá el sol, la música sonará y finalmente podrás avanzar con la vida que Dios pretendió para ti con gracia , fuerza, coraje y confianza.



  • Algunas personas tienen grandeza sobre ellos. Muy pocos tienen la excelencia puesta en ellos.



  • A partir de hoy, trata a todos los que conoces como si está noche fuera su último día. Extiéndales todo el cuidado, amabilidad y comprensión que pueda reunir, y hágalo sin pensar en ninguna recompensa. Tú vida no volverá a ser la misma de nuevo.



  • Son los que se concentran en una cosa a la vez los que avanzan en este mundo. El gran hombre o mujer es el que nunca sale de su especialidad o disipa tontamente su individualidad.



  • Siempre busca la semilla del triunfo en cada adversidad.



  • Los obstáculos son necesarios para el éxito.



  • Reconoceré la recompensa porque constituye mi pago; pero también daré acogida a los obstáculos porque constituyen para mí un desafío.



  • Si siento depresión, cantaré. Si siento tristeza, reiré. Si me siento enfermo duplicaré mi trabajo. Si siento miedo seguiré adelante. Si me siento pobre pensaré en la riqueza. Si me siento insignificante recordaré mis metas.