Hay algo en el generoso y abnegado amor de un animal que llega directamente al corazón de aquel que con frecuencia ha probado la falsa amistad y la frágil fidelidad del hombre.
Cuando Dios quiere enloquecer a alguien, satisface todos sus deseos.
No hay nada peor que aquellos que confunden la lealtad con la aceptación de todos los errores.
La fidelidad que ha sido comprada con dinero puede ser vencida por el dinero.
Si encuentras a la persona indicada, ¿por qué perder el tiempo con otras?
No basta que una esposa sea fiel, es menester que su marido, sus amigos y sus vecinos crean en su fidelidad.
En la fidelidad a las cosas pequeñas, consiste la perfección.
El que es leal eleva su mirada con humildad, y el que es desleal, con soberbia.”