Frases de Conciencia
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La práctica consiste en abandonar nuestros pensamientos sobre una cosa y, sin perdernos en ningún aspecto concreto de esa corriente de pensamientos, abrir nuestra mente a todo lo que aparezca en el flujo de nuestra conciencia.
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La facilidad para seguir los dictados de la propia conciencia parece ser, considerada a largo plazo, un acicate tan importante como las escuelas elegantes, los profesores particulares y los costosos campamentos educativos de verano.
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EspÃrituSanto; y, en realidad, éste no es otra cosa que la tranquilidad de ánimo que surge en la mente por las buenas acciones.
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¡Cómo es el hombre! ¡Con qué facilidad puede engañarse su conciencia, encontrando en la supuesta voz del deber la licencia para la pasión!
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Todos ellos, sin duda, tenÃan agua, luz, gas, teléfono, un techo bajo el que vivir junto a todos los electrodomésticos que su nómina pudiera pagar y una salud que era la envidia de tres cuartas partes de la humanidad. Pero, a pesar de todo, aparentemente eran infelices; a pesar de formar parte de la elite que hemos dado en llamar primer mundo, occidente o cualquier eufemismo por el estilo que evite decir a las claras que nosotros somos los ricos privilegiados y el resto, los pobres sin esperanza. HabrÃa que organizar infinidad de maratones televisivos para recaudar los fondos necesarios de cara a limpiar nuestras conciencias de tal definición.
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La imagenpoética ilumina con tal luz la conciencia que es del todo inútil buscarle antecedentes inconscientes.
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La conciencia y la responsabilidad constituyen precisamente los dos hechos fundamentales de la existencia humana.
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Puedo estar sola, fregar platos, leer libros, construir frases, escuchar y ser feliz sin mala conciencia.
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Que en donde quiera que vivan los hombres, o verbigracia, mujeres, habrá ingratitud, egoÃsmo, y unos que manden a los otros y les cojan la voluntad. Por lo que debemos hacer lo que nos manda la conciencia, y dejar que se peleen aquellos por un hueso, como los perros; los otros por un juguete, como los niños, o estos por mangonear, como los mayores, y no reñir con nadie, y tomar lo que Dios nos ponga delante, como los pájaros...
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¿Sabes qué te aguarda en Jerusalem? Un mundo nuevo, jamás se ha podido ver nada igual, allà no eres como nacieste, sino como te dicta tu interior, un reino de conciencia, de paz en vez de guerra, de amor en vez de odio, eso es lo que te aguarda al final de la Cruzada.
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¡Fabricarse una conciencia para sÃ, una moral personal, una religión personal!... Estas cosas, por su naturaleza, no pueden ser privadas.
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Yo no milito en las filas de ningún partido polÃtico, no me he inscrito en los registros de ninguna agrupación partidarista; mi conducta ha estado normada siempre por la inspiración de mi propia conciencia, en la más absoluta libertad.
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Todo lo he hecho a sabiendas y no me arrepiento de nada. Ni de lo bueno, ni de lo malo, ni de los momentos felices, ni de las tristezas... Al final, tengo el alma llena de paz y tranquilidad.
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La conciencia a los culpados ahorca tan pronto y bien,que hay muy pocos que no estén dentro de su pecho ahorcados.
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La verdad en si misma solo puede ser alcanzada dentro de uno mediante la más profunda meditación y conciencia
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La escritura es una larga introspección, es un viaje hacia las cavernas más oscuras de la conciencia, una lenta meditación.
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En cada acto médico debe estar presente el respeto por el paciente y los conceptos éticos y morales; entonces la ciencia y la conciencia estarán siempre del mismo lado, del lado de la humanidad.
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Cuando el hombre trabaja la naturaleza, al mismo hombre también se le trabaja. O dicho de un modo un poco diferente: cuando el hombre trabaja, interviene en la naturaleza y deja en ella su huella. Pero en este proceso laboral también la naturaleza interviene en el hombre y deja huella en su conciencia.
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Quizás es un signo de locura, quizás es tu conciencia el nudo de la vida, en el cual nos reconocen y lanzan a la existencia...
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Tal vez, después de un delito, es mucho más fácil acallar la conciencia propia que la lengua de un vecino.
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