Frases de Asombro

Una vez que creemos en nosotros mismos, podemos arriesgarnos a la curiosidad, el asombro, el deleite espontáneo o cualquier experiencia que revele el espíritu humano.

El asombro, más que la duda, es la raíz de todo conocimiento.

Para cambiar tu vida por fuera debes cambiar tú por dentro. En el momento en que te dispones a cambiar, es asombroso cómo el universo comienza a ayudarte, y te trae lo que necesitas.

Los días de mi infancia transcurrieron de asombro en asombro, de revelación en revelación. Nací en un medio rural y crecí frente a un horizonte de balidos y relinchos.

Siempre me asombro de mí mismo. Es lo único que hace la vida digna de ser vivida.

Posiblemente la primera impresión más interesante de mi vida vino del mundo de los sueños.

Quien ha abierto los ojos en el territorio más alucinante del mundo, pierde la capacidad de asombro.

La sorpresa es la emoción más corta, porque tenemos que estar sorprendidos hasta que sabemos de qué lo estamos. Siempre se trata de algo inesperado.

El hombre tiene que despertar al asombro.

Cuanto más grande es la isla del conocimiento, más larga es la costa del asombro.

De hecho, me llevé una agradable sorpresa de ser madre porque esperaba que fuera más difícil y tuviera que hacer más adaptaciones.

Los premios son siempre una agradable sorpresa. Son las piezas de algodón de azúcar de nuestro trabajo.

Sólo creo que el sentimiento de asombro es increíble. Estoy empujando a mí mismo por lo que yo puedo humanamente esforzarme... Sólo puedo esperar lo mejor y esperar lo peor.

¿Quién de nosotros no ha mirado hacia el cielo en una noche estrellada, perdido en el asombro ante la inmensidad del espacio y la belleza de las estrellas?

La poesía es un acuerdo de la alegría y el dolor y el asombro, con un guión del diccionario.

De todas las maravillas que he oído, la que mayor asombro me causa es que los hombres tengan miedo.

Este régimen de cinco minutos al día de reconocimiento y gratitud te ayudará a enfocar tu vida en el asombro.

La explicación nos separa del asombro, lo que es la única puerta de entrada a lo incomprensible.

Nada sorprende tanto a la gente como el sentido común y el trato sencillo.

Aceptemos la verdad, incluso cuando nos sorprende y altera nuestros puntos de vista.

Nunca pierdas el asombro infantil. Muestra gratitud… No te quejes; simplemente trabaja más duro… Nunca te rindas.

Si usted quiere saber de verdad en qué se basa la Tierra Media, le diré que en mi asombro y deleite ante la tierra tal como es, particularmente, la tierra natural.

El asombro nos espera en cada esquina.

No hay grandes límites para el crecimiento porque no hay límites de la inteligencia, la imaginación y el asombro humanos.

En la vida, lo único que puede esperar es lo inesperado; la única sorpresa es un día sin ninguna.

Precisamente, es característico del filósofo este estado de ánimo: el de la maravilla, pues el principio de la filosofía no es otro.

Toco un instrumento musical un poco, pero solo para mi propio asombro.

Ya que la filosofía surge del asombro, un filósofo está obligado a, en su camino, ser un amante de mitos y fábulas poéticas. Poetas y filósofos son equiparables en asombro.

Creo que la gente pierde la capacidad de sorprenderse porque diariamente presencia desastres que suceden en todos lados.

Estoy realmente asombrado cuando pienso en lo débil que mi mente es, y lo propensa que es al error.

Una primera impresión deslumbrante no era lo mismo que el amor a primera vista. Pero seguramente fue una invitación a considerar el asunto.

Si el mundo puede permanecer dentro de un marco como una pintura en la pared, creo que veríamos la belleza entonces y estamos mirando con asombro.

Disculpen si les llamo caballeros, pero es que no les conozco muy bien.

El verdadero científico nunca pierde la facultad de asombro.

El vino abre las puertas con asombro y en el refugio de los meses vuelca su cuerpo de empapadas alas rojas.

Siempre hay detrás de la muerte de alguien como una estupefacción que se desprende, tan difícil es comprender esta llegada inesperada de la nada y resignarse a creerlo.

¡Cuanto más sabio se vuelva, menos se sorprenderá!.

Cuando todo haya terminado, quiero decir: toda mi vida fui una novia casada con el asombro. Yo fui el novio, tomando el mundo entre mis brazos.

Nada me inspira más veneración y asombro que un anciano que sabe cambiar de opinión.

Donde menos se piensa, salta la liebre.