Frases contra el Bullying
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Sé tú mismo. No te preocupes por lo que los demás piensan de ti, porque es muy probable que ellos se sientan igual de asustados que tú.
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Soy antisocial o eso dicen. No me sé mezclar. Es raro, porque soy muy social, todo depende de lo que entiendas por social.
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Cuando la gente te daña una y otra vez, piensa sobre ellos como papel de lijar. Pueden arañarte o dañarte un poco, pero al final, tú terminas pulido y ellos terminan siendo inútiles.
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El abuso consiste en que la persona menos competente y más agresiva proyecta su incompetencia en la persona más competente y menos agresiva.
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No apartes la mirada. Una vez que has visto, no puedes actuar como si no supieras. Abre tus ojos a la verdad, está a tu alrededor. No ignores lo que tus ojos te revelan.
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A menudo, el camino correcto es el que puede ser más duro de seguir. Pero el camino duro es también el que te hará crecer como un ser humano.
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Las cosas se tornarán más fáciles. El modo de pensar de las personas cambiará y deberÃas estar vivo para poder verlo.
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No sabes lo que se siente cuando nada se siente bien. No sabes lo que se siente ser como yo, estar herido, estar perdido, que te dejen solo en la oscuridad, que te pateen cuando estás en el suelo.
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Si los acosadores creyeran que alguien los ama y cree en ellos, se amarÃan a sà mismos, se transformarÃan en mejores personas y se convertirÃan en los defensores de los acosados.
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Por cada cosa mala que ocurre o cada comentario desagradable, hay mucho más detrás de ese hecho. Es importante ver la imagen completa y darnos cuenta de que esa persona también está lidiando con algún problema.
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Si eres malo conmigo, voy a escribir una canción sobre ello, y no te va a gustar. Asà es como funciono yo.
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Superar el abuso no ocurre solo. Se hace paso a paso y positivamente. Que hoy sea el dÃa en que comienzas a moverte hacia delante.
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Cuando aparece un gran genio en el mundo, se puede reconocer por esta señal: todos los mentecatos se confabulan contra él.
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La gente que se ama a sà misma no hace daño a otra gente. Cuando más nos odiamos a nosotros mismos, más queremos que otros sufran.
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