Skip to main content

El control de cambios no es, en realidad, sino un nuevo paso por el camino que conduce a la implantación del socialismo. Contemplado desde cualquier o

Cita de Ludwig von Mises sobre la ineficacia del control de cambios

El control de cambios no es, en realidad, sino un nuevo paso por el camino que conduce a la implantación del socialismo. Contemplado desde cualquier otro ángulo, su ineficacia es notoria. Ni a la corta, ni a la larga, lo más mínimo influye en la determinación del precio de las divisas extranjeras.


Frases de Ludwig von Mises

Interpretacion

Mises critica el control de cambios como una medida ineficaz que, según él, solo sirve para avanzar hacia el socialismo. Señala que esas políticas no alteran el precio de las divisas y, por tanto, no cumplen sus objetivos económicos. La cita refleja una visión liberal clásica sobre la ineficacia de la intervención estatal en los mercados cambiarios. Implica una advertencia sobre consecuencias políticas y económicas no deseadas.

Temas

economía control de cambios liberalismo mises política monetaria divisas intervención estatal


Te pueden interesar también



    El hombre nace un ser asocial y antisocial. El recién nacido es un salvaje. El egoísmo es su naturaleza. Solo la experiencia de la vida y las enseñanzas de sus padres, sus hermanos, hermanas, compañeros de juego y más tarde de otras personas lo obligan a reconocer las ventajas de la cooperación social y, en consecuencia, a cambiar su comportamiento.



    La experiencia nos dice algo que antes no sabíamos y no podíamos aprender, sin haber tenido la experiencia.



    El sistema capitalista es un sistema en el que la promoción es, precisamente, de acuerdo al mérito. Si la gente no sale adelante, no hay amargura en sus mentes. Son reacios a admitir que no avanzan debido a su falta de inteligencia. Llevan a cabo su falta de avance en la sociedad. Muchos culpan a la sociedad y se convierten al socialismo.



    Sobre el año 1700, la población de Gran Bretaña era de aproximadamente 5,5 millones; a mediados de 1700, la población era de 6,5 millones, unos 500.000 de los cuales eran simplemente indigentes. Todo el sistema económico había producido un “excedente” de población.



    La corrupción es un mal inherente a todo gobierno que no está controlado por la opinión pública.