Después de los treinta años, un cuerpo tiene una mente propia. — Bette Midler
Después de los treinta años, un cuerpo tiene una mente propia.
Interpretacion
La frase sugiere que la experiencia y el paso del tiempo confieren autonomía al cuerpo respecto a deseos o hábitos. Plantea una separación entre la intención y las respuestas físicas. Puede leerse como observación sobre cambios en salud, energía y comportamientos tras los treinta. Invita a aceptar la dinámica entre cuerpo y mente en la madurez.
Temas
citas edad madurez cuerpo mente bette midler reflexión
Te pueden interesar también